El gabinete que acompañará a la presidenta electa Michelle Bachelet incluye al exfuncionario de la ONU Heraldo Muñoz como canciller, a un economista como ministro de Educación, e integra por primera vez en 40 años a una militante comunista.
Sin embargo, Bachelet no pudo concretar su intención de repetir la paridad de género en su equipo de 23 colaboradores que asumirán junto a ella el próximo 11 de marzo.
"Es un equipo seleccionado en base de condiciones de liderazgo, técnica, compromiso con el programa de gobierno y condiciones", dijo la mandataria electa al anunciar su primer gabinete.
En un colmado salón del hotel Plaza San Francisco en Santiago, Bachelet definió al canciller Muñoz como un político "con una amplia experiencia internacional", tras un extenso desempeño en las Naciones Unidas y como ministro del gobierno del socialista Ricardo Lagos (2000-2006), y embajador en Brasil.
Había una gran expectación por conocer al nuevo canciller, que deberá hacer frente al escenario posterior al fallo que este lunes entregará la Corte Internacional de Justicia de La Haya por el diferendo marítimo entre Chile y Perú, tras el que se espera que se inicie una nueva etapa de relaciones entre ambos países.
Perú demandó a Chile en 2008, alegando la inexistencia de una delimitación marítima, cuestión que Chile considera zanjada desde hace seis décadas.
"El derecho internacional está de nuestro lado", afirmó Muñoz en sus primeras declaraciones.
"Muñoz tiene una experiencia a nivel mundial y tiene especial experiencia en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas", integrado por Chile por dos años como miembro no permanente, explicó a la AFP el cientista político Guillermo Holzmann.
"Su nombre asegura una buena relación con los distintos países, con los que Chile tiene una visión más cercana, incluido Estados Unidos", agregó.
Un gabinete no paritario
Cumpliendo el plazo que ella misma se impuso, Bachelet entregó los nombres de su gabinete seis semanas antes de asumir el poder, tras imponerse en segunda vuelta ante la derechista Evelyn Matthei.
En la composición del nuevo gabinete se mantiene el equilibrio de fuerzas dentro de la coalición política que apoya a Bachelet, conformada por socialistas, demócratas cristianos, radicales y comunistas, pero no cumplió con la paridad de género con que arrancó su primer mandato (2006-2010), al integrar ahora a sólo nueve ministras en 23 integrantes del gabinete.
"Me hubiera gustado que este equipo fuera totalmente paritario, (...) pero representa un tremendo desafío que tenemos como país la incorporación de un mayor número de mujeres a cargos de alta responsabilidad", dijo Bachelet.
Como ministro del Interior y Seguridad Bachelet nombró a Rodrigo Peñailillo, un estrecho colaborador durante su anterior gobierno, que preparó el retorno de la mandataria a Santiago y su repostulación.
Con 39 años, Peñailillo había mantenido hasta ahora un bajo perfil y dentro del entorno de la mandataria se afirma que ella le tiene plena confianza.
En Educación, un área vital por el ambicioso plan de reformas que comprometió Bachelet -como la gratuidad universitaria en un plazo de seis años- fue nombrado el economista Nicolás Eyzaguirre, exministro de Hacienda del presidente Lagos y exdirector para América Latina del Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Todos sabemos que necesitamos, como dijo la presidenta, una educación de calidad, pública, gratuita en todos los niveles", dijo el nuevo ministro.
Los estudiantes chilenos han protagonizado desde 2011 multitudinarias manifestaciones callejeras en demanda de educación pública gratuita y calidad, e inicialmente, se han mostrado desconfiados de las reformas de Bachelet.
"No sabemos qué piensa de las demandas estudiantiles. Tiene una tibia postura hacia la educación gratuita. Con él como ministro de Hacienda se aprobó el Crédito con Aval del Estado (CAE), que tiene a miles de familias endeudadas", comentó como primera reacción Melisa Sepúlveda, presidenta de la poderosa Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile.
En el ministerio de Hacienda, Bachelet nombró al economista Alberto Arenas, exdirector de Presupuesto durante su anterior gestión y jefe programático de su última campaña electoral, que tendrá que liderar la reforma tributaria comprometida por Bachelet.
Los comunistas vuelven al gobierno
Como ministra del Servicio Nacional de la Mujer (Senam), Bachelet nombró a la exconcejala por la comuna de Santiago y antropóloga, Claudia Pascual. Con su designación, el partido Comunista chileno regresa al gobierno tras cuarenta años de ausencia, después de sellar un acuerdo electoral con los partidos de centro izquierda que apoyan a Bachelet.
Desde el regreso a la democracia tras la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), el PC formó parte de la oposición y se mantuvo relegado de la primera línea de la política chilena hasta que en 2009, ganaron sus primeros tres diputados.
En las últimas elecciones, duplicaron su presencia en el Congreso, con un total de seis parlamentarios, entre ellos las exdirigentes estudiantes Karol Cariola y Camila Vallejo.
"Es sorpresivo que se haya incorporado a una ministra" del PC, porque se esperaba un rol más secundario, explicó Holzmann.
"Al tener un ministro comunista evita que el partido tenga una influencia y presión permanente sobre el gobierno", agregó el analista.