Precluyen indagación a fiscal por fraude | El Nuevo Siglo
Martes, 3 de Septiembre de 2013

El Tribunal Superior de Villavicencio precluyó la investigación que se adelantó contra Juan Carlos Espinel, Fiscal 16 delegado ante Jueces Penales de Medina (Cundinamarca), por los delitos de cohecho y fraude procesal, en grado de tentativa.

 

Los hechos ocurrieron el 12 de marzo de 2013, cuando el CTI de Villavicencio capturó a Espinel Rodríguez, quien se encontraba con el abogado Luis González, que, a su vez, ofrecía sus servicios a la esposa de una persona capturada por el delito de porte ilegal de armas. Supuestamente en dicha reunión se acordaría el pago de dos millones de pesos para alterar un dictamen pericial de balística.

Luego de interceptaciones realizadas al abogado litigante González Marín, a quien la Fiscalía le adelanta otro proceso por el delito de pornografía infantil, se estableció que el Fiscal y el abogado sostendrían tal reunión, lo cual posibilitó las aprehensiones.

 

El 12 de julio último, el Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Villavicencio decretó la ilegalidad de las capturas del Fiscal de Medina, Juan Carlos Espinel Rodríguez, y del abogado Luis Alberto González Marín, ordenó la revocatoria de las medidas de aseguramiento y la libertad de los procesados.

Sin embargo, González Marín quedó por cuenta de ese mismo Juzgado, por el delito sexual, ya que la Fiscalía cuenta con evidencias que, al parecer, lo involucran en actos sexuales indebidos con una menor de 9 años de edad.

 

La Fiscalía delegada ante el Tribunal Superior de Villavicencio consideró que era procedente la preclusión para el fiscal Espinel, y el pasado 17 de junio solicitó al Tribunal que concediera dicha solicitud.

 

El 23 de agosto último, en decisión de segunda instancia y con ponencia del magistrado Alcibíades Vargas Bautista, el Tribunal precluyó el proceso, luego de considerar la atipicidad del delito de fraude procesal y ante la imposibilidad de desvirtuar la presunción de inocencia del imputado, en relación con el delito de cohecho ya que no se contó con pruebas por aceptación de dádivas.