El gerente general de Fedearroz, Rafael Hernández, confía en que la llegada del contingente no afecte la producción
Frente a la llegada al país de 79 mil toneladas de arroz proveniente de Estados Unidos, el gerente general de la Federación Nacional de Arroceros, Fedearroz, Rafael Hernández, dijo que no espera que afecte el precio del producto en el mercado nacional.
En su momento el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, explicó que el contingente viene, tal como está pactado, a través de la firma Export Trading Company, “la cual, la capital colombiana hace parte de un 50% y se están finiquitando los últimos trámites de la constitución de esa sociedad y se prevé el primer debe llegar en noviembre”.
Ante ello, el gerente del sector gremial indicó que como es una importación ya pactada “coincide cuando la cosecha ha pasado pues la cosecha termia en octubre pero no afecta el precio del arroz nacional. Ya no queda gran cantidad de producto por recolectar. Esperamos que no afecte el precio aunque indudablemente cualquier importación afecta”.
El Ministro descartó que se afecte la estructura del precio puesto que “dado el consumo del país, no es superior a ocho días de consumo, es decir que no es una cantidad desmesurada”, en cambio, dice “fortalece el buen suministro del mercado”.
Falencias
Para Hernández, actualmente hay una especie de “guerra de precios” de los grandes industriales que se disputan el mercado como reacción ante la llegada de contingentes como este que ingresará al país el otro mes.
Además, “no hay ninguna conexión en el precio de la materia prima y el precio final al consumidor”, al tiempo que hizo un llamado al gremio para que “nos integremos hacia adelante y que los agricultores tengan un sitio en dónde secar el arroz para que puedan guardarlo un tiempo y puedan venderlo cuando pase la cosecha”.
El Gerente General de Fedearroz admitió que esta es una de las principales falencias por las que atraviesa el gremio cuando se ven obligados a vender arroz verde.
“En Estados Unidos, Uruguay o Argentina los productores cosechan y secan ellos mismos y si tal vez no les sirve el precio en ese momento, pues almacenan la producción. Por eso en Colombia debemos hacer uso de un incentivo de almacenamiento”.
Frente a los inconformismos de algunos arroceros, Hernández reiteró que el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos se viene discutiendo desde hace seis años, por lo que “a estas alturas llorar sobre la leche derramada no tiene sentido”.
Aclaró que en el marco del acuerdo se logro que el arancel de partida sea del 80%, tal como está actualmente y “se comienza a desgravar en 19 años, de los cuales, los primeros seis son de gracia y no hay desgravación sino a partir del séptimo año”.
En ese sentido, el Ministro Restrepo destacó que uno de los beneficios de los arroceros es que “hasta el último centavo debe invertirse en apoyar la tecnología, infraestructura del sector básico y será una fuente de financiamiento para que iniciemos la gran tarea de la ‘Reingeniería de la industria arrocera en Colombia’”.
La intención del Gobierno es que el gremio adquiera mayor productividad para que cuando terminen los periodos de desgravación previstos en el TLC, “en ese momento cuando puedan llegar cantidades ilimitadas y sin aranceles de arroces extranjeros encuentre a una industria productora de arroz más eficiente”, dijo Restrepo el pasado fin de semana en el marco de una reunión con el gremio.
Allí, el gerente de Fedearroz celebró que “la Comisión Nacional de Crédito aprobó créditos hasta de 15 años para la compra de equipos y la modernización del sector. Este es un sector al que hay que hacerle reingeniería, adecuaciones al predial y riego, por eso le pedimos al Ministro que se financie la construcción de pozos profundos para la irrigación de cultivos en la época de verano”.
Los arroceros no tendrán de qué preocuparse cuando llegue el primer contingente de producto internacional, dice el Gobierno.