Precandidatos republicanos miran ahora a Puerto Rico | El Nuevo Siglo
Martes, 13 de Marzo de 2012

Agobiados por la criminalidad y el desempleo que supera el 15%, los puertorriqueños serán cortejados desde el miércoles por los precandidatos del Partido Republicano de Estados Unidos, que por primera vez van a la isla en busca de delegados y fondos para sus campañas.

El domingo se celebra en Puerto Rico un caucus (asamblea de partido) republicano donde están en juego 20 delegados, pero la gran contradicción de esta inédita presencia de los precandidatos republicanos es que los puertorriqueños, si bien son ciudadanos de Estados Unidos por una ley de 1917, no tienen derecho a votar en las elecciones presidenciales si viven en la isla.

Reforzado por el doble triunfo del martes en las primarias de Alabama y Misisipi, Rick Santorum llegó a Puerto Rico para adelantarse tres días a su rival Mitt Romney, que arribará el viernes, un día después que su esposa Ann, con quien asistirá a actos de campaña en este territorio que desde 1952 es estado libre asociado a Estados Unidos.

"Iremos allá adonde haya votos", dijo el ultraconservador Santorum en su discurso de victoria del martes al anunciar su agenda en Puerto Rico, donde se reunirá con el gobernador Luis Fortuño, asistirá a un consejo de autoridades locales y se entrevistará con medios de la isla.

Los últimos resultados de la primaria en Estados Unidos fueron tan ajustados entre los candidatos que han dejado abierta la carrera por la investidura del partido republicano, sin un claro favorito para las elecciones presidenciales del 6 de noviembre contra el mandatario demócrata Barack Obama.

A los dos principales rivales de la contienda republicana, se suma Fred Karger, un precandidato prácticamente desconocido, abiertamente homosexual que dice ser la opción más moderada para rescatar al partido. Karger estará en la isla hasta el lunes próximo.

"El partido Republicano está listo para este proceso primarista", dijo El comisionado electoral del Partido Republicano en Puerto Rico, José Meléndez.

Con 3,7 millones de habitantes y una población electoral que ronda los dos millones de personas, se estima que el próximo domingo acudan a votar en la primaria republicana unos 150.000 votantes, según indicó Meléndez.

En Estados Unidos viven 4,6 millones de puertorriqueños, según el censo de 2010 y, de acuerdo al departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Florida, esta comunidad suele votar por el partido Demócrata.

Romney llega a la isla con el apoyo del gobernador puertorriqueño Luis Fortuño, quien respaldó al multimillonario exgobernador de Massachussetts en las primarias de Florida en enero pasado.

En su cortejo a los boricuas, Romney prometió que al llegar a la Casa Blanca apoyará que Puerto Rico se convierta en el estado número 51 de Estados Unidos, si lo aprueban los puertorriqueños en un referéndum no vinculante que se prepara para este año.

"Les puedo decir que voy a trabajar con él (Fortuño) para asegurarnos que si ese voto es a favor de la anexión, nosotros haremos el proceso en Washington para darle ese estatuto a Puerto Rico", afirmó Romney.

Romney cuenta en la isla como portavoz de su campaña con Zoraida Fonalledas, miembro de una de las familias más ricas de la isla, propietarios del enorme centro comercial Plaza Las Américas en San Juan.

El comisionado Electoral del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Roberto Iván Aponte, lamentó "que se malgasten 800.000 dólares y el salario de 20 empleados del gobierno para un ejercicio fútil de jugar a la anexión".

Añadió que es el más claro ejemplo de lo que es vivir bajo la colonia en el estado libre asociado.

Por el momento Newt Gingrich no ha confirmado ninguna visita a la isla mientras que Ron Paul es impulsado como abanderado en la defensa de los derechos constitucionales y en la solución de la crisis económica por la que atraviesa Estados Unidos y Puerto Rico, según su delegado Luis del Valle.

"Ron Paul es el único precandidato presidencial que favorece la autonomía de los estados, incluyendo a Puerto Rico, en asuntos como la libre determinación del idioma que se utilizará gubernamentalmente", dijo Del Valle.