Portugal confirmó su salida de recesión en el tercer trimestre, al registrar una tímida alza de su Producto Interior Bruto (PIB) de 0,2%, anunció el jueves el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en una primera estimación.

El PIB aumentó respecto a los tres meses precedentes, pero retrocede respecto al mismo período del año anterior. En el segundo trimestre, la economía portuguesa había crecido 1,1%, poniendo fin a dos años y medio de recesión.

Sin embargo la recuperación es frágil y la crisis está lejos de haber terminado: después de esos 30 meses de recesión la economía de Portugal --país bajo asistencia financiera-- está en un "momento crucial", opina el ministro de Economía Antonio Pires de Lima, y recupera un "crecimiento moderado".

Pero las previsiones para todo el año 2013 siguen siendo negativas, y el gobierno augura una caída del PIB del 1,8%, antes de una recuperación (+0,8%) en 2014.

Pese a la acumulación de algunos buenos indicadores --exportaciones en alza, cifras récord del turismo, recuperación de los sectores automotor o inmobiliario-- los analistas siguen siendo muy prudentes.

"Aún es muy pronto para decir que el final de la crisis está cerca. Portugal debe primero salir de su programa de asistencia, y hay que ver si la dosis de austeridad no habrá sido excesiva", comentó a la AFP Paula Carvalho, economista del banco BPI.

"Las medidas de rigor pesan sobre el consumo de las familias, y los dos próximos trimestres podrían ser menos positivos", advierte la economista.

Hundido por su deuda y con difícil acceso a los mercados financieros, Portugal obtuvo en mayo de 2011 una línea de crédito de 78.000 millones de euros, prometidos por el FMI y la Unión Europea a cambio de un drástico plan de recortes.

Para salir de su plan de rescate en julio de 2014, como está previsto, el país deberá recuperar la confianza de los mercados para financiar a un costo razonable su enorme deuda, que este año será del 127,8% del PIB.