Por 12 años la Procuraduría destituyó e inhabilitó a la exgobernadora de Quindío, Sandra Paola Hurtado, por irregularidades en el principio de transparencia y el deber de selección objetiva de la contratación estatal cuando fue gobernadora departamental para el periodo 2012 – 2015.
Hurtado aspiraba a la Cámara de Representantes por el partido Cambio Radical y con esta decisión del Ministerio Público se caería la candidatura de la exgobernadora.
El caso por el que se inhabilita a Hurtado tiene que ver con la suscripción irregular de más de 5 convenios interadministrativos con entidades como Esaquin, que hoy se llama Empresas Públicas del Quindío, EPQ y la Promotora de Vivienda del Quindío, empresas que no tenían capacidad técnica ni financiera para ejecutar las obras y, que en consecuencia, subcontrataron con privados para ejecutarlas con dineros de las regalías.
En este caso, calificado como un acto de corrupción y falta gravísima, también participaron los gobernadores encargados, Jhon Jaime Fernández y Julio Ernesto Ospina Gómez, quienes fueron sancionados con destitución e inhabilidad de 10 años.