Desde enero está cerrada, por un hundimiento, una de las vías más importantes del norte de la ciudad, la Carrera 11 con Calle 98, que sirve para descongestionar en horas pico la movilidad, la apertura de este corredor está en veremos, no solo por las diferencias entre la administración y el constructor, sino porque es un peligro para los usuarios.

Ante esta realidad, la Comisión de Veeduría de las Curadurías Urbanas de Bogotá, determinó elevar la solicitud de investigación disciplinaria ante la Procuraduría General de la Nación contra la Curadora Urbana No 4, por el incumplimiento en el trámite de la licencia. “El estudio geotécnico definitivo debe contener como mínimo el informe de suelos que deben incluir planos de localización regional y local del proyecto, ubicación de los trabajos de campo, registros de perforación y resultado de ensayos de campo y laboratorio y resumen de memorias de cálculo. Además, planos, esquemas, dibujos, gráficas, fotografías, y todos los aspectos que se requieran para ilustrar y justificar adecuadamente el estudio y sus recomendaciones”.

La veeduría para este proyecto está conformada por la Secretaría del Hábitat como delegada de la Alcaldía Mayor, la Sociedad Colombiana de Arquitectos, la Sociedad Colombiana de Ingenieros, el representante de asociaciones y fundaciones sin ánimo de lucro y la Personera Delegada para el Medio Ambiente y el Desarrollo Urbano.

Teniendo en cuenta el hundimiento del terreno las investigaciones implican a las curadoras urbanas número 4, Nohora Cortés Cuellar y número 3, María Esther Peñaloza por la licencia al proyecto Green Office de la Constructora Pijao.

Entre las decisiones también se pedirá investigación de los profesionales de suelos (Curaduría y Proyectista) ante el Consejo Profesional Nacional de Ingeniería y se hará un seguimiento por parte del Fopae a las acciones administrativas contenidas en el Decreto 247 de 2012 expedido por el Alcalde Mayor de Bogotá.

Para no agrandar el problema, la veeduría recomienda a la Curadora Urbana 3 desistir de la solicitud de modificación de la licencia del edificio Green Office en razón a que ha superado el término de los 45 días establecidos para pronunciarse de fondo sobre la solicitud.

Además de la investigación de Veeduría no se vislumbra una solución para su apertura, debido a que después de un diagnóstico de la Universidad Nacional sobre las obras que se deben realizar por la construcción del edificio Green Office, la controversia técnica ha reinado.

Ante la falta de soluciones por el trancón en el sector, el Alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, la semana pasada dio 10 días de plazo a la Constructora Pijao para que realice las obras de mitigación necesarias frente al hundimiento que se generó en la vía.

Según el mandatario, el constructor tiene la opción de realizar una de las dos obras, que según los estudios de la Universidad Nacional se deben llevar a cabo, para mitigar el daño causado en el suelo y subsuelo.

“El constructor tiene la opción de hacer unilateralmente las obras que la Universidad Nacional pide.  Nosotros no podemos esperar más, va a tener  10 días, si no lo hace entramos a actuar con medidas policivas”, manifestó el Alcalde Mayor.

Para la Universidad Nacional el Constructor tiene dos opciones para hacer las obras de mitigación, una es la cimentación de un muro que aísle la edificación del subsuelo y la otra el relleno de dos subsótanos que permitan mayor estabilidad del terreno.

Petro agregó que: “eso tiene un valor aproximado de 12 mil millones de pesos, el constructor puede hacer alguna de las dos, sino las hace nosotros entramos a hacerlas y se le cobrarán las obras respectivas”.

El Alcalde enfatizó que el único interés de su Administración es la puesta en funcionamiento de la vía que debió ser cerrada desde el pasado mes de enero, debido al hundimiento causado por la construcción de un edificio en la zona.

A su turno, la constructora Pijao le solicita a la Administración Distrital tener en cuenta las conclusiones del estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros, que se conocerá en los próximos días, para, supuestamente, corroborar que el edificio Green Office no presenta ninguna deficiencia en el proceso constructivo y que por lo tanto no necesita las obras de mitigación que expone el estudio de la Universidad Nacional.

Para la constructora los estudios y mediciones realizados sobre la vía, inclinómetros y pruebas de carga hechos por la Universidad Nacional demuestran que la Carrera 11 es estable y no representa ningún riesgo. Por lo tanto, hemos pedido en reiteradas ocasiones que sea abierta al tráfico normal.