La popularidad de la presidenta chilena Michelle Bachelet en abril subió tres puntos respecto al mes anterior y alcanzó un 29%, según un sondeo publicado este miércoles, que mantiene la hipótesis de que la mandataria resultó favorecida por "un clima de unidad nacional" tras la muerte del expresidente Patricio Aylwin.

El sondeo mensual de la encuestadora Adimark mostró un alza para el mes de abril de la aprobación a la mandataria socialista, desde un 26% a un 29%, mientras que su nivel de desaprobación bajó desde un 67 a un 65%.

"Es posible plantear, a modo de hipótesis, que en el transversal clima de unidad y reconocimiento de la historia reciente del país que despertara el funeral del expresidente Aylwin se encuentre la explicación para esta mejoría observada en el mes", explicó el sondeo.

Aylwin, el primer mandatario tras la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), murió el 19 de abril, a los 97 años, por causas naturales.

El gobierno de Bachelet decretó duelo oficial por tres días y organizó para él un funeral de Estado, en el que se destacó su legado como uno de los artífices de la pacífica transición a la democracia desde la cruenta dictadura de Pinochet que dejó más de 3.200 muertos y desaparecidos.

La encuestadora Adimarck resaltó que no obstante su repunte "la presidenta cumple exactamente 12 meses con una aprobación inferior al 30%. Este resultado, por su extensión, se constituye en un hecho inédito en esta serie histórica iniciada en 2006".

Al frente del gobierno chileno, por segunda vez, desde marzo de 2014, Bachelet lleva adelante una serie de reformas destinadas a cambiar el sistema educativo, tributario y la actual Constitución, heredados de la dictadura de Pinochet.

Pero su gobierno ha sido golpeado por una serie de escándalos de corrupción política, uno de los cuales involucra a su hijo mayor, Sebastián Dávalos, y a su nuera Natalia Compagnon, investigados por evasión de impuestos y tráfico de influencias en la compra y venta de terrenos en el sur de Chile.

Este caso provocó el desplome de la popularidad de Bachelet, que cerró el 2015 con un 24% de apoyo, luego de haber ganado las elecciones de 2013 con más del 60% de los votos.

Su primera gestión presidencial, entre 2006 y 2010, se cerró con un 84% de aprobación.

La encuesta de Adimark se realizó entre el 8 y el 28 de abril, con entrevistas a 1.074 personas y un margen de error del 3%.