EL MOMENTO del orden público en Nariño es preocupante, advirtió Manuel Enríquez Rosero, exsenador por La U, por el accionar de los grupos armados ilegales y la delincuencia común.
Expresó que ciudades como Ipiales, Tumaco y otras están en manos de la delincuencia común y eso a la vez genera un grave problema social. Señaló que también los campesinos y los productores de leche son víctimas de extorsión y amenazas de secuestro de los grupos armados.
Explicó Enríquez que las empresas procesadoras de leche han tenido que salir del territorio, y eso hace que no haya compradores suficientes y el precio del producto baje. También ha conspirado la sequía impactando a la agricultura y ganadería.
Sostuvo que lo único que florece en Nariño son los cultivos ilícitos, como lo viene registrando Naciones Unidas, pues sus cifras muestran el incremento de los sembrados de coca respecto al año anterior. “Tristemente el departamento de Nariño ocupa el primer lugar con 60.000 hectáreas de cultivos de coca”, dijo el también exembajador en Ecuador.
Por otra parte, el excongresista dijo que a pesar de los esfuerzos que viene haciendo el gobernador para llegar a un acuerdo con el frente Comuneros del Sur, disidencia del Eln, hay la presencia de otros grupos como la Segunda Marquetalia atraídos por el negocio del narcotráfico.
Enríquez Rosero señaló, además, que poco o nada es lo que ha realizado el Gobierno por la crisis de seguridad en Nariño, así como en inversión, a pesar de los anuncios, los compromisos y las promesas que se hicieron. “De hecho a raíz de uno de esos anuncios el departamento de Nariño se volcó a apoyar la propuesta de gobierno del presidente Gustavo Petro, pero hasta hoy no hay ni una sola obra que el Gobierno le muestre al departamento de Nariño”, dijo.
Mirando a los comicios del 2026, el exsenador dijo que hay la necesidad de que se unan los que quieren retomar el rumbo ante el fracaso en su opinión del Gobierno; y sobre las reformas señaló que no son soluciones.
Añadió que, por ejemplo, se acaba de aprobar la reforma laboral en Cámara, pero que mejorará la situación de algunos trabajadores, pero no grandes problemas como la informalidad y el desempleo que afecta a los jóvenes y las mujeres.
Sostuvo también que no se observa en el nuevo proyecto de reforma a la salud soluciones a problemas como la escasez de medicamentos, el deterioro de las EPS y la carencia de una buena atención. “Las principales apuestas del Gobierno hoy serán un rotundo fracaso”, concluyó Enríquez Rosero.