Finalmente solo la bancada de Cambio Radical se opuso al archivo del proyecto de reforma a la salud, que ayer se hundió en las comisiones séptimas por 11 votos contra dos en Senado y 16 contra tres en Cámara.
Luego de que la totalidad de la coalición oficialista se uniera a la mayoría de senadores y representantes que abogaban por el hundimiento de la iniciativa, los congresistas de Cambio Radical a través de un comunicado lamentaron lo ocurrido, alegando que “el proyecto de ley garantizaba el derecho a la salud y la sostenibilidad del sistema e incorporaba soluciones a problemáticas que se hicieron evidentes con la crisis del covid-19”.
Tras enumerar varias bondades que la bancada rescató del proyecto hundido, los legisladores de Cambio Radical se declararon convencidos, “como millones de colombianos, que el sistema de salud debe ser reformado ya que es débil y presenta muchos problemas, los cuales se hicieron aún más evidentes durante la pandemia. Por eso seguiremos trabajando para alcanzar un sistema de salud robusto y fortalecido que atienda con oportunidad y calidad a los ciudadanos”.
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Otro proyecto
“Esperamos que en el próximo proyecto sobre salud se dé un debate de altura, con argumentos y dejando a un lado las fake news”, anotó la bancada, precisando que esa organización política “se ha destacado por ser un partido de propuestas que realmente benefician a los colombianos. Sería muy fácil y simplista no hacer nada, quedarse callado, no generar ideas y solo opinar para hundir propuestas de otros, pero esa no es la misión de esta colectividad, nuestro objetivo es trabajar por y para los colombianos”.
Luego de preguntarse “¿hasta cuándo se va a permitir que las EPS no cumplan con sus obligaciones y que continúen los paseos de la muerte? ¿Hasta cuándo se va a permitir la tercerización que maltrata laboral, profesional y personalmente a los trabajadores de la salud? ¿Hasta cuándo las madres tendrán una atención diferenciada y no se les reconocerán económicamente sus licencias de maternidad?”, Cambio Radical invitó “a los partidos políticos y a todos los congresistas a enfrentar los debates que Colombia necesita con urgencia y no dejarse llevar por información y especulaciones que carecen de profundidad y seriedad”.
Como ya se dijo, desafiando las cuentas que había hecho EL NUEVO SIGLO, solo los congresistas de Cambio Radical votaron no a la proposición de archivo (Carlos Fernando Motoa, Fabián Castillo, Ángela Sánchez, Jairo Humberto Cristo y Jorge Enrique Benedetti).
Ayer, en la sesión de las comisiones conjuntas, votó sí la bancada del Centro Democrático (Milla Romero, Honorio Henríquez, Gabriel Velasco, Jennifer Arias y Jairo Cristancho), así como el representante por Bogotá, Carlos Eduardo Acosta, de Colombia Justa Libres.
Votos conocidos
En la coalición oficialista ya habían anunciado su voto por el archivo los congresistas del Partido Conservador (Nadia Blel y María Cristina Soto), La U (José Ritter López, Norma Hurtado y Fáber Muñoz) y el partido Mira (Aydee Lizarazo).
También se conocía la posición del Partido Liberal (Laura Fortich, Juan Carlos Reinales, José Luis Correa, Henry Correal y Juan Diego Echavarría).
Como lo anticipó este Diario, el representante por la circunscripción afrocolombiana John Arley Murillo, de Colombia Renaciente, apoyó el hundimiento de la iniciativa.
Y, por supuesto, la oposición sostuvo hasta el final su rechazo al proyecto con sus nueve votos, es decir los de la Alianza Verde (José Aulo Polo, Mauricio Toro y Fabián Díaz), el Polo Democrático (Alberto Castilla), el partido Dignidad (Jorge Gómez), el partido Comunes (Victoria Sandino, Jairo Cala y Ómar de Jesús Restrepo) y el Movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia, AICO (Manuel Palchucán).
Desde su radicación, el año pasado, la iniciativa fue objeto de duros cuestionamientos por parte del gremio médico, así como de otros grupos de trabajadores afines, y en consecuencia poco a poco fue perdiendo apoyo.
De nada sirvió el esfuerzo de Cambio Radical y otros sectores políticos por acoger parte de las más de 300 proposiciones presentadas para modificar el articulado, porque al igual que pasó con la tributaria la reforma a la salud polarizó opiniones, radicalizando los conceptos de sus detractores, que prefirieron su archivo y concertar un nuevo articulado.