Más de 600 personas elaboraron y firmaron lo que se ha denominado el "Manifiesto por el Estado de Derecho y la Democracia". Entre los firmantes se encuentran exministros, exsuperintendentes, exmagistrados y expresidentes de las altas cortes.
Además, participan economistas, empresarios, líderes del sector privado, profesionales independientes, y más de 80 abogados de 30 firmas del país, y ciudadanos que están preocupados por la situación actual.
Este manifiesto es un llamado colectivo dirigido al presidente Gustavo Petro, su gobierno y su coalición, solicitando el respeto a la Constitución, las leyes y la separación de poderes.
Como parte integral del pueblo colombiano, los firmantes solicitan que todos los ciudadanos sean tratados de manera respetuosa, independientemente de las posturas que tengan frente al gobierno.
El texto también reclama el respeto pleno a la independencia y la autonomía de la rama judicial. Los jueces son quienes resuelven las diferencias que se presentan entre la sociedad y son el último bastión de defensa de la Constitución y de las instituciones democráticas del país.
Finalmente, ante el recrudecimiento de la inseguridad en diversas regiones del país, le solicitan al presidente Petro que asegure que el monopolio de la fuerza esté radicado en el Estado y que no permita la proliferación, el aumento y la consolidación de grupos armados ilegales.
En este nuevo llamado, se reitera que la democracia requiere que el presidente se abstenga de usar un lenguaje polarizante y divisivo.