Para el senador Juan Manuel Galán, Colombia necesita una Corte Electoral independiente, autónoma, imparcial, que realmente esté dedicada a impartir justicia. “Una Corte con magistrados que cumplan altos requisitos profesionales, con estándares de formación y excelencia ética, que les permita tomar decisiones y fallos que corrijan los defectos crónicos que se han entronizado como cultura”.
“Adicionalmente, las fallas de las últimas elecciones parlamentarias relacionadas con el sistema de distribución de tarjetones para las consultas, son un síntoma de los desafíos que tiene la Registraduría Nacional del Estado Civil en materia de personal, herramientas tecnológicas y recursos para garantizar en todo el territorio nacional, elecciones libres, justas y competitivas”, dijo Galán.
Expresó que “al Congreso de la República le quedan tres meses de trabajo legislativo para terminar un periodo de cuatro años, por lo que es urgente aprovechar este tiempo para avanzar en los retos pendientes: me refiero a la reforma al sistema electoral, a garantizar la transparencia de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) que entran en el proceso, y a resguardar la información electoral contenida en aplicaciones, soluciones informáticas, registros magnéticos y “back up” utilizados en todo el proceso electoral.”
Manifestó Galán que “el fallo del Consejo de Estado comprobó irregularidades en el escrutinio de votos del 50% de las mesas de votación del país, así como alteraciones en el software utilizado para el conteo y pérdida de material electoral. Aunque el partido MIRA recuperó sus tres curules en el Senado después del fallo, los demás colombianos quedamos en incertidumbre y la veracidad de los resultados electorales de las próximas elecciones presidenciales está de entrada cuestionada. ¡32 años tiene nuestro código electoral! Es hora de reformarlo”.
Por su lado, Alejandra Barrios directora de la MOE, recalcó que “la falta de tarjetas electorales no fue en todo el país”, y expresó que “es importante que en el momento en que empiece el escrutinio, los jurados tengan las indicaciones precisas para que los votos sean bien contados”.
Agregó que “la presencia de la Registraduría no asegura un total control de las elecciones. “Aquí debe estar el CNE y tiene que responder también por el proceso electoral”.
“Tenemos un balance positivo”, afirmó Barrios y resaltó la importancia de la paz en las elecciones. “El Eln mantuvo su palabra de no irrumpir en la seguridad de los ciudadanos y eso garantizó el flujo correcto del día en los municipios”, dijo.
La directora del MOE aseguró que “por desgracia se mantuvo la compra de votos y el movimiento de recursos. Hay cientos de fotos que evidencian compra de votos y transferencia de bienes. Eso no nos permite avanzar a ser una democracia decente”.
La MOE destaca la participación histórica lograda por la ciudadanía en estas elecciones que, con datos del preconteo, llega a ser del 49%, cuatro puntos porcentuales por encima del promedio que han tenido estas elecciones desde 1991 (45%). Pese a que este dato es histórico, que un poco más de la mitad de las personas habilitadas para votar no salga a ejercer su derecho ciudadano, demuestra los retos enormes que tiene la democracia colombiana sobre todo en mejorar la cultura política, causa necesaria para una ciudadanía informada y responsable de los procesos políticos del país.