Reforma judicial, el disenso como consenso | El Nuevo Siglo
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Domingo, 16 de Septiembre de 2018
Redacción Política
Esta semana el gobierno presentó su proyecto de modificación a esta rama del poder público. Aunque dijo que había sido concertada con las cortes, los presidentes de estas expusieron un amplio número de peros al articulado.

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EL NUEVO SIGLO habló con expresidentes de Cortes y exministros sobre los aciertos y desaciertos de la iniciativa.

1. ¿Qué es lo más destacado y positivo de la Reforma a la Justicia?

2. ¿Cuáles son los puntos más polémicos?

3. ¿Qué otros puntos deberían abordarse en la reforma?

José Gregorio Hernández, ex presidente de la Corte Constitucional

1. Creo que sí es favorable que los altos magistrados no tengan ninguna injerencia de carácter político en los temas propios de carácter electoral. Hay que buscar los medios para despolitizar la administración de justicia.

2. Las medidas que se proponen no logran verdaderamente erradicar la corrupción. Por ejemplo, establecer una inhabilidad de cuatro años para los exmagistrados y no establecer una forma digna de remuneración para ellos me parece que es promocionar la corrupción para personas que carezcan de principios.

Me parece que la acción de tutela no tendría por qué meterse en el acto legislativo. Ese no es un tema que tenga que ver con la actual administración de justicia.

3. Me parece que no contempla todos los temas que deberían ser objeto de un análisis de carácter global sobre la administración de justicia, porque creo que faltan muchos elementos. Como por ejemplo, lo relacionado a la excesiva morosidad, lo referente a la ubicación de la Jurisdicción Especial para la Paz en el contexto de nuestro sistema jurídico, parece que esta estuviera por fuera del sistema.

Me parece que hay necesidad de regulaciones sobre la forma en cómo son elegidos los magistrados de las corporaciones de justicia. Debería exigirse que quienes aspiren a altos cargos de la jurisdicción presenten un examen exigente sin carácter político.

Carlos Medellín, ex ministro de Justicia

1. El proyecto del gobierno recoge casi en su integridad el proyecto que presentó Cambio Radical. Entonces mi concepto sobre el proyecto del Gobierno es que es el mismo concepto del proyecto de Cambio Radical, respecto del cual digo que tiene varios puntos importantes, como es la intensión de separar a los magistrados de los temas políticos relacionados con la elección de dignatarios, porque ese es uno de los grandes problemas actuales, y es que los magistrados gran parte de su tiempo se dedican hacer política.

2. En la del Gobierno, la posibilidad de que el Presidente elija al Fiscal: que si una vez presentada la terna pasa un mes y la Corte no elige, el Presidente tiene que elegir al Fiscal; creo que eso es lo más polémico del proyecto.

De resto los otros temas que trae son importantes, necesarios, pero son los mismos temas del proyecto de Cambio Radical. Lo que no me parece conveniente es que los magistrados participen en la discusión de la reforma.

3. Tiene muchos temas y es bueno que la reforma sea integral, y no solamente que se reduzca a uno o dos puntos. Hay muchos temas que creo que son importantes como el que mencioné, de quitarles a los magistrados las posibilidades de elegir altos dignatarios, como el Procurador y Contralor. La reforma lo que dice es que para ser magistrados eleva los requisitos a edad de 50 años.

Gustavo Gómez, ex presidente del Consejo de Estado

1. Pensaría que un componente que se le asignó a los casos de intervención de los jueces de garantías, cuando hay reconocimiento de autoría y culpabilidad que permitiría en el caso de los procesos penales que el juez de garantías tome la determinación y no signifique una carga más en la justicia penal.

2. Lo más polémico es que no resuelve el problema que tenemos en Colombia con el sistema de justicia, porque el problema no se resuelve regulando quien nombre y a quien nombra. El problema es más de fondo, más estructural. En consecuencia estaríamos perdiendo el tiempo girando sobre un hueco.

3. Lo más importante es buscar un sistema dentro del cual al ciudadano se le dé una respuesta oportuna, eficaz a su demanda de justicia. Me parece a mí que el funcionamiento del aparato judicial es importante que se potencialicen las primeras y las segundas instancias a fin de que los pleitos se puedan resolver lo más rápido, y disminuir las competencias y disminuirlas a la unificación jurisprudencial.

Me parece importante el tema de la abolición de los fueros. El fuero debe preservarse solamente para el Presidente de la República. No tiene sentido que los ministros, gobernadores y magistrados tengan fuero. Deben ser investigados de manera homogénea.

Hernando Torres, ex presidente del Consejo Superior Judicatura

1. Depende del enfoque que tengamos. Creo que una reforma debe mirar sobre todo al ciudadano. Y la administración de justicia debe mirar básicamente las demandas cotidianas de los ciudadanos. Entonces creo que esta reforma de la justicia, como las anteriores, está muy focalizada sobre las cúpulas, lo cual no significa una descalificación, pues no corresponde básicamente a lo que los ciudadanos pueden esperar. La pregunta sería, ¿esta reforma cómo va a impactar la demanda de justicia de los ciudadanos?

2. Lo más polémico que se puede presentar en la reforma es el punto que hace relación con la cantidad de exigencias que le están poniendo tanto para llegar a la magistratura, como para el ejercicio posterior que deben hacer los magistrados, son bastantes barreras que se les coloca. Por ejemplo, el hecho de pedirles un determinado tiempo y haber estado en la judicatura, implica que quien no haya estado en la judicatura nunca podrá llegar a ser magistrado. Y creo que la reforma anterior hizo algo muy positivo y es hacer una mezcla entre la academia y la judicatura. Me parece que la administración de justicia no se puede cargar en los jueces, los abogados, los intervinientes, los peritos; me parece que es un concepto bastante cerrado.

3. Le hace falta meterle ciudadanos, lo que significa mirar más lo cotidiano; eso significa mirar más las competencias de los juzgados de base. La justicia debe fortalecer los juzgados de base. También tiene que mirar un poco los órganos que han sido delegados en el Ejecutivo para administrar justicia. Ahí están las superintendencias, ahí están las delegaciones que hace el Ejecutivo en los órganos de arbitraje. Creo que hay que mirar todo eso, porque de otra manera la justicia quedaría muy restringida. Lo que veo es que van a restringir el acceso de muchos ciudadanos a la justicia por la vía de la tutela.

Jorge Londoño, exministro de Justicia

1. Hay puntos importantes, no porque estemos o no estemos de acuerdo con ellos, sino porque hay que discutirlos. Y uno de ellos es lo que tiene que ver con la tutela. Ese es un tema vital e importante en el entendido de que hay que defender su esencia y la manera cómo hasta hoy ha defendido los derechos fundamentales.

El tema de la administración de los recursos de las altas Cortes. Algo que no está y es la autonomía de la Rama Judicial. Eso es fundamental. Algo que es fundamental es lo que tiene que ver con el precedente judicial.

2. Uno de los puntos polémicos será lo que tiene que ver con la tutela, el de la reforma que se plantea.

3. Algo que es fundamental que es la autonomía presupuestal de la Rama Judicial y la descongestión. Los ciudadanos lo que quieren es justicia pronta y eficaz. Lo de la descongestión es vital para que haya justicia pronta.

Juan Carlos Esguerra, exministro de Justicia

1. Tiene varias cosas destacables. Uno, el gobierno de la administración de justicia que se propone, que me parece razonable, bien estructurado. Las precisiones que le hace a la acción de tutela, aunque me da la idea de que por otro lado le abre la compuerta y la deslegitima un poco, pero me parece que le hace unas precisiones que son útiles.

2. Me parece que los requisitos, que para ser magistrado de las altas Cortes haya tenido que ser juez durante cinco años, lo cual no hubiera permitido que Fernando Hinestrosa, haya sido magistrado de la Corte Suprema.

3. Creo que habría que abordar más a fondo los temas relacionados con la congestión en los despachos judiciales, los abusos que se presentan por parte de abogados interesados en determinados procesos, yo le recortaría algunas de las oportunidades que se les da a la gente para que se burle de la justicia.

 

 

Lo que dicen las altas Cortes

 

El magistrado Germán Bula, presidente del Consejo de Estado, le contó a EL NUEVO SIGLO que el martes le propondrá a la Sala Plena del alto Tribunal analizar la reforma punto a punto.

"Hay bastante trabajo detrás de las propuestas que tienen que ver con la acción de tutela y eso hace que la discusión allí pueda ser muy rica. También creo que el tema de juicio de aforados tiene elementos muy importantes para esclarecer el rol de la Comisión de Acusaciones de la Cámara, la naturaleza del juicio de indignidad, la competencia de la Corte Suprema, etc", dijo Bula.

El magistrado Luis Guillermo Guerrero, presidente de la Corte Constitucional, se refirió a las inhabilidades planteadas para los extogados (cuatro años sin poder litigar directa o indirectamente ante su jurisdicción ni postularse a cargos de elección popular), indicando que “es un tema sensible y complejo porque afecta la actitud de desarrollo de los magistrados, porque cuando terminan su mandato en la Corte, cuando tienen todavía una carrera profesional por delante, eso implica que necesitan aplicarse a aquello en lo que son expertos. Entonces una inhabilidad tan grande, tan prolongada, genera dificultades”.

Sobre que los togados no intervengan para escoger Procurador y Contralor, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, José Luis Barceló, se preguntó “en manos de quién queda la elección de esos funcionarios”.