Representante de Cambio Radical, Héctor Vergara, habla sobre la iniciativa que busca hacerle modificaciones a este mecanismo
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EL NUEVO SIGLO: Actualmente se tramita en el Congreso un proyecto que busca hacerle una serie de modificaciones al mecanismo de la revocatoria de mandato, ¿en qué consisten?
HÉCTOR VERGARA SIERRA: Queremos que el mecanismo de revocatoria de mandato a alcaldes y gobernadores deje de ser un saludo a la bandera. Queremos volverlo eficaz, garantista. Queremos que el ciudadano tenga confianza y el proceso esté revestido de credibilidad bajo un argumento muy claro, el proceso debe estar fundado en razones objetivas. Queremos que no solo se deje en causas subjetivas, como por ejemplo, que no me gusta como habla el Alcalde. Buscamos que se asocie al cumplimiento del programa de gobierno, que básicamente está asociado al voto programático y que además esté asociado al cumplimiento del Plan de Desarrollo Territorial. Además, queremos darles las garantías tanto a los mandatarios que son objeto de la revocatoria y al mismo ciudadano a través de una audiencia pública donde ellos puedan participar activamente, puedan informarse y también queremos darles garantías por medio de los diferentes medios de comunicación, prensa escrita para que el ciudadano pueda saber las razones por las cuales se está adelantando este proceso. Lo que queremos con el proyecto es que este deje de ser una figura decorativa y que realmente tenga en la práctica una efectividad, como la democracia lo requiere.
ENS: El proyecto también contempla que las revocatorias se realizarían en una sola fecha al año, ¿por qué?
HVS: Efectivamente. Esta es una sugerencia de la academia. Nos pareció muy pertinente porque de esta manera el Estado reduce el costo y tiene unos ahorros. No es lo mismo programar en un año 20 revocatorias que programarlas en un solo día en distintos municipios. Habría unos ahorros significativos. Lo hacemos también por un tema de organización.
ENS: Esta semana la iniciativa fue aprobada en primer debate, ¿en la discusión se le hicieron modificaciones?
HVS: De fondo no se le hicieron modificaciones. Efectivamente, surtió primer debate. Fue ampliamente debatido, fue una discusión muy amplia. Ahora viene el segundo debate en la plenaria de la Cámara de Representantes.
ENS: ¿Qué opina el Gobierno del proyecto?, ¿han recibido algún concepto del Ministerio del Interior?
HVS: El Gobierno no ha fijado una posición, no ha hecho un concepto como tal. Pero lo que hemos podido extraer del Ministerio del Interior es que es un proyecto que les agrada. El origen de la iniciativa y de esa reforma al Estatuto de Participación Ciudadana se da por un exhorto de la Corte Constitucional que básicamente le dice al Congreso de la República que regule la materia por los vacíos que se presentaron en el pasado en muchas revocatorias.
ENS: ¿Cómo ve el ambiente en el Congreso de la República?
HVS: Bastante favorable. Creo que es un muy buen proyecto. Pertinente, importante para nuestra democracia, para que el ciudadano sienta que su voluntad fue tenida en cuenta y para que los alcaldes también sientan que tienen garantías frente al proceso como tal. Por ejemplo, los alcaldes antes no eran ni siquiera notificados, se les violaba el debido proceso.
ENS: Otra iniciativa que también impulsa se denomina aprovechamiento digno, ¿en qué consiste?
HVS: El proyecto garantiza que dentro de los contratos donde se fijan las condiciones para explorar y extraer hidrocarburos y minerales en los planes de responsabilidad social empresarial las empresas se vean obligadas a priorizar las inversiones. Que no sean inversiones que no estén ligadas a los Planes de Desarrollo y sean pertinentes. Que se invierta en servicios públicos domiciliarios para cerrar las brechas.
ENS: ¿Cómo va su trámite?
HVS: A ese proyecto le falta un debate en el Senado de la República. Ya ha surtido sus tres primeros debates. Ha tenido una gran acogida, una gran receptividad por parte de la Cámara. Va a tener un impacto bastante relevante en nuestros territorios porque va a cerrar las brechas sociales y va a acabar con la inmensa paradoja que hoy existe en aquellos territorios, en las zonas de influencia donde se extrae y explota hidrocarburos, que carecen de la oferta de servicios públicos domiciliarios cuando el subsuelo de su territorio se hayan estos importantes recursos naturales no renovables. Es decir, paradójicamente son ricos, pero a la vez pobres.