El Polo Democrático recusará a la ministra Silvia Constaín. Según el Gobierno, la iniciativa busca modernizar el sector y reducir la brecha digital
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Un verdadero pulso político se librará en los próximos días en las plenarias de Cámara y Senado, cuando entre a discusión en último debate el proyecto de ley que busca modernizar el sector de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, TIC.
Esta iniciativa fue presentada desde comienzos del actual gobierno con mensaje de urgencia, pues forma parte de un capítulo del dedicado a la visión de sociedad digital dentro del Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022.
La propuesta, que ya fue aprobada en las comisiones primeras, pasa ahora a la plenaria sin mayores cambios, y aunque aún no figura en la agenda legislativa de ambas corporaciones, cuenta suficiente tiempo para ser discutida y aprobada, incluso conciliada, en sesiones extras. Estas irían entre los próximos 18 y 21 de diciembre.
Son cinco los grandes cambios que propone el Ministerio de las TIC con este proyecto de ley:
1- Mayor estabilidad jurídica para los inversionistas mediante la asignación más extensa del espectro radioeléctrico, justamente para que los inversionistas puedan recuperar más fácil su inversión. En principio, se pasaría de 10 a 20 años, aunque el Gobierno propondrá en plenarias un plazo mayor.
2- Con la unificación de los fondos de las TIC y de la Televisión en un solo fondo único, a cargo del Ministerio TIC, se pretende reducir la brecha digital, y los recursos que se consigan serán destinados para beneficio de cobertura de comunidades indígenas, raizales, palenqueras, afrocolombianas y población Rom (gitanos).
3. Destinar más recursos para la televisión y la radio públicas.
4. Crea un regulador único e independice que integre en un solo ente a la Comisión de Regulación de las Comunicaciones y la Autoridad Nacional de Televisión.
5- Abrir mayor competencia entre los operadores privados y las plataformas tecnológicas donde, en igualdad de condiciones, se fomente el desarrollo de contenidos televisivos digitales.
Todo ello, ha explicado la ministra TIC, Silvia Constaín, acompañado de mayor cobertura de conectividad con Internet de calidad superior para otros 20 millones de colombianos que hoy no gozan de ese servicio, vital para el desarrollo social y económico del país.
Del mundo analógico al Digital
De acuerdo con el representante conservador Ciro Rodríguez, ponente en de la iniciativa en Cámara, “la importancia de este proyecto radica en que es transversal a todo el desarrollo social y económico del país”.
“Una buena conectividad, un Internet de calidad 5G fomenta el derecho a la libertad de expresión y de comunicación, apoya al sector salud a través de la Telemedicina, mejora la educación, el transporte, etc. Es el principal eje del desarrollo. Por eso, el principal objetivo de esta ley es reducir la gran brecha digital que hay en el país”, dice.
La convergencia es otro de los propósitos. “No tiene sentido que existan varios órganos reguladores: uno en televisión, otro en radio y otro en telecomunicaciones. Con un solo órgano regulador se logra mayor eficiencia”, dice el congresista.
Frente a la inversión foránea, Rodríguez añade que se bajarían las cargas tributarias a los operadores para que se bajen los precios de conectividad.
Respecto de la televisión pública y los canales privados, se plantean varios cambios. Primero, el régimen jurídico que pasará del actual de concesiones a licencias. Eso permitiría pasar de dos a más canales privados.
Explica Rodríguez que al haber más operadores, al fisco le ingresarán más recursos y por tanto se podrá mejorar la infraestructura de telecomunicaciones.
“Por el uso del espectro, los públicos y privados antes pagaban 1,5% sobre sus ingresos brutos, ahora pagarán 2,2%, todos por igual”, insiste el parlamentario de Norte de Santander.
Por otra parte, explica el ponente que se eleva a servicio público las plataformas digitales, lo que garantiza más calidad en la producción televisiva.
Tampoco es cierto, afirma, que a los canales privados se les rebajarán $128.000 millones. “Aquí lo que hay son operadores como las OTT que entran libremente al mercado a través de los operadores de cable. Lo que hace el proyecto es equilibrar el mercado para que haya una habilitación general”.
La ventaja de este cambio, según el ponente, es que con el régimen de habilitación general no se cobrará por entrar al mercado sino que se genera un equilibrio entre todos los operadores, públicos y privados”.
Fuerzas encontradas
A pesar de las bondades del proyecto, las críticas van en aumento. El Polo Democrático, por ejemplo, ya anunció acciones legales contra la Ministra TIC.
“Vamos a recusar a la Ministra de Comunicaciones, porque hasta hace poco trabajaba para Apple, Facebook, Google, trasnacionales que se favorecen con la ley TIC. Una vez más la puerta giratoria. Crece la indignación de todos los sectores de la cultura contra esta ley”, escribió el legislador en su cuenta de Twitter.
El senador Jorge Enrique Robledo, además, critica que la iniciativa “politiza y aumenta el poder del Gobierno sobre la libertad de expresión”.
El Partido Verde, entre tanto, cuestionó al Gobierno por “el afán” con que quiere sacar este proyecto, pues lo radicó con mensaje de urgencia.
El senador Antanas Mockus le pidió al Gobierno aplazar el estudio en plenarias hasta marzo “mientras se realizan cuatro audiencias con todos los actores interesados”.
Y el Partido Liberal, que es la segunda bancada del Congreso y la más numerosa en Cámara, anunció que “revisará con lupa” este proyecto, pues “acabaría con la televisión pública en Colombia”, según publicó en sus redes sociales.
Según el representante liberal José Luis Correa, su colectividad “se opone” a cualquier proyecto que pueda atentar contra la libertad de prensa y de expresión, y que defiende “el derecho y la igualdad de la televisión pública en armonía con la existencia de los canales privados”.
Por ahora, los ponentes esperan convencer a las plenarias “de la importancia de conectar a más de 20 millones de colombianos y de fortalecer tanto la televisión pública como los canales privados”, señaló Rodríguez.