Los miembros de la Comisión Tercera del Senado buscan reunirse a discutir el tema este viernes

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Para la propuesta de renta básica, ¿cuántos subsidios existentes se deben eliminar?, les preguntó EL NUEVO SIGLO a los senadores Iván Marulanda, de la Alianza Verde, y Ciro Ramírez, del Centro Democrático.

Para Marulanda no hay que quitar, sino sumar. Según dijo, “aquí el Estado está respondiendo para que las familias no sufran hambre en el estado de indefensión que los dejó esta pandemia. De eso es de lo que se trata. Lo que hemos dicho es que no hay que quitar. A lo que está entregando el Gobierno hay que sumarle unos cuatro millones de hogares”, anotando que a los hogares que ya están en Familias en Acción, Adulto Mayor, Ingreso Solidario y devolución del IVA “habría que subirles lo que les falta para llegar al salario mínimo durante tres meses y que se prolongue, en caso que esto se extienda”.

Pero Ramírez no está de acuerdo. “Lo que decimos nosotros es que el Gobierno debe hacer más y eso se hace con giros extraordinarios para Colombia Mayor, Familias en Acción. Y nuestra propuesta es aumentar el Ingreso Solidario a $420.000, llevarlo a 6 meses más y ampliarlo a 5,2 millones de hogares colombianos para que hoy todos los programas sociales lleguen a 9 millones de hogares impactados”.

Debate

El tema de la renta básica se quedó en el tintero en el Congreso debido a que fue analizado a última hora, sin embargo, eso no lo deja exento de discusión.

La Comisión Tercera del Senado, encargada de ese tema, al parecer, se reunirá informalmente esta semana para abordar, nuevamente el tema y hacer una propuesta consolidada que pueda convencer al Gobierno de la urgencia de adoptar esta medida.

La iniciativa, que fue presentada con el respaldo de 53 congresistas, tenía como la finalidad cambiar el nombre del programa ingreso solidario, ampliar su cobertura y aumentar el monto de las transferencias hasta alcanzar una renta básica de emergencia de un salario mínimo legal mensual vigente, de manera que el Estado garantizará a los colombianos una vida digna durante la crisis derivada de la pandemia por el Covid-19, y se proponía la creación de la renta básica de emergencia. El objetivo es cubrir a 9 millones de familias que producto de la emergencia se quedaron sin nada.

Cuando fue radicada la iniciativa, el Gobierno respondió que programas sociales como Familias en Acción, Colombia Mayor y Jóvenes en Acción alcanzan a un porcentaje importante de la población pobre de Colombia y que ya con esos auxilios se genera una renta básica; sin embargo, quienes impulsan la propuesta aseguran que aún falta cobertura y sobre todo que a esas familias les llegue un monto superior de recursos. Al parecer, el Gobierno estaría pensando en lanzar un programa con el alcance de la renta básica, pero aún está en conversaciones con los creadores de la propuesta. 

Necesaria

El senador Marulanda aseguró que en la propuesta, que nació desde los diferentes partidos, “estamos hablando de 9 millones de hogares, cerca de 30 millones de colombianos, y de una renta básica no de $260.000, como el de Familias en Acción, sino de $877.000 mensuales por hogar. Un salario mínimo durante tres meses. Nosotros vamos a seguir discutiendo esta propuesta de manera informal para construir un acuerdo con todos los partidos. Actualmente estamos nueve partidos en la propuesta de la renta básica. Faltan los partidos de Gobierno y se trata que todos estemos de acuerdo para que esto sea una realidad”.

Así mismo, sostuvo que “no es cierto que los programas del Gobierno tengan una cobertura universal. Ellos no llegan a los 5 millones de hogares y es muy reducido el monto. Es decir, van entre $160.000 y $220.000, pero cualquiera de esos rubros está por debajo de la línea de pobreza por persona. Nosotros estamos hablando de un ingreso mensual equivalente al salario mínimo vital, tres o cuatro veces lo que se está entregando”.

Marulanda expresó que “el Estado tiene capacidad de endeudamiento, tiene presupuesto, que se puede entregar a estos programas y postergar gastos que no son urgentes ni prioritarios. Lo más importante hoy es que la población no sufra hambre, nada más. Además, el Estado puede refinanciar la deuda que debe cancelar este año de acuerdo con el presupuesto, $54 billones. El Gobierno puede reemplazar la mitad de esos recursos con créditos frescos y esa plata que tiene ahí para pagar la deuda la puede pagar con nuevos créditos a menores tasas de interés y mejores plazos”.

Sin acuerdo

Ramírez expuso que se ha opuesto a “que vayamos a quitar de los subsidios actuales que se entregan. Es un esfuerzo adicional, por ejemplo quitar los subsidios de energía y gas es meterse con el bolsillo de los colombianos. Eso no se puede. Este es un tema transitorio, pero se debe dar permanencia a los programas sociales, revisar qué otros subsidios van por el camino equivocado, como el tema de pensiones altas y mantener como permanente el ingreso solidario”.

El senador Ramírez insistió en que “la renta básica ya existe, pero una universal es otra cosa. La renta básica condicionada es la que nosotros llamamos Familias en Acción, la que ellos llaman universal es imposible hacerlo. Y por qué. Porque eso va para los más ricos de Colombia y eso es absurdo”.

“Impulsaría el crecimiento del consumo”

Desde la sociedad civil, la coordinadora de la iniciativa, Aura Rodríguez, indicó que “las plataformas de derechos humanos y más de 100 organizaciones de todo el país nos hemos unido en esta campaña en la que solicitamos que se apruebe esta propuesta que podría ser la base para salvar las vidas de millones de colombianos en este momento, además de ser la base del crecimiento del consumo en el país”.

La activista destacó que la propuesta “permitiría contrarrestar los efectos nocivos causados por el aumento del desempleo, la quiebra de pequeños comercios y las restricciones al comercio informal. Permitiría generar demanda efectiva de bienes y servicios básicos, lo que menguaría los efectos de la crisis económica; además, salvaría las vidas amenazadas por la carencia de alimentos y bienes básicos”.