Partidos que surgieron después de 2002 se han ido consolidando: Liendo | El Nuevo Siglo
Jueves, 20 de Marzo de 2014

Los partidos políticos que surgieron a principios de la década pasada como La U, Cambio Radical, el Partido Verde (hoy Alianza Verde) y el Polo se han ido consolidando.

Así lo señalóNicolás Alejandro Liendo, coordinador del Área de Instituciones Políticas de la Escuela de Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Sergio Arboleda, quien también se refirió a los efectos del umbral en las elecciones.

EL NUEVO SIGLO: ¿En qué consiste la investigación que adelanta la Escuela sobre partidos políticos?

NICOLÁS ALEJANDRO LIENDO: Estamos adelantando un trabajo sobre nuevos partidos en Colombia, en donde vemos cómo históricamente les va a  aquellos que se presentan por primera vez. En la década de los 90 hubo un crecimiento tremendo en la cantidad de nuevos partidos con relación a los partidos tradicionales, que son el Liberal y el Conservador, y en los últimos tiempos a partir de le ley que se establece en el 2003, el Acto Legislativo 01, disminuyen sustancialmente pero se consolidan unos nuevos partidos en el sistema político que son Cambio Radical, el Polo, el Partido Verde y el MIRA.

Son partidos que surgieron desde el 2002, se han consolidado y fíjense que han ido pasando el umbral. El MIRA va a pasar el umbral, creo, en Cámara, así que creo que va a sobrevivir.

ENS: ¿Es mejor para un país tener muchos o pocos partidos? 

NAL: Ahí hay dos lados de la biblioteca: por un lado si uno prefiere tener mayor participación y pluralidad en las expresiones políticas de la gente, que fue lo que hizo la Constitución del 91, se permitió que muchos partidos surgieran y las leyes eran bastante flexibles en relación al surgimiento de nuevos partidos, pero lo que se tenía era unos congresos ingobernables en donde sacar una ley era un proceso muy complejo o que con ‘mermelada’ o dinero se compraba legisladores individuales. Entonces esa representación era más cooptada que en representación de la gente.

Ese era el escenario de los 90, en el escenario actual con el umbral lo que se busca es tener un pequeño número de partidos, en una oscilación entre ocho y diez partidos, pero más fuerte en términos de bancada que puedan sacar leyes adelante, aumentar la coherencia ideológica entre ellos y menos, supuestamente, dóciles a la influencia del partido en el Gobierno. Eso aumenta el control político y aumenta también, se espera, la gobernabilidad del Presidente porque hay una relación importante entre el Presidente y Congreso.

ENS: ¿Pero también se podría leer que los partidos grandes utilizan el umbral para sacar de la pista a los minoritarios?

NAL: Por eso digo que es una elección de qué tipo de sistema se prefiere, si prefiere un sistema en donde prima la participación, la pluralidad de voces, entonces se baja y elimina el umbral o pone un umbral bajito del 1% o el 2%, que era lo que tenía anteriormente.

Si uno mira desde que vamos aumentando el umbral, disminuyen los partidos de manera mecánica. Lo que le da menos partidos es más fuerza a cada partido, o sea cada partido tiene más curules en relación a antes y eso hace que para negociar, para el Presidente sea más fácil hablar con menos voces, dar mayor coherencia interna, se supone.

Entonces, lo que por un lado gana de gobernabilidad el Presidente en la relación Presidente-Congreso, lo pierde de pluralidad de voces. Se supone que eso se traslada a los partidos tradicionales porque si uno mira esos partidos que surgieron en la década de los 90, primer problema: microempresas electorales. Cualquiera se armaba un partido político y ganaba dinero con eso, uno sabe cómo se pagan los votos. Segundo problema: los partidos tradicionales se separaban en pequeños partidos, el Partido Conservador en tres o cuatro; el Partido Liberal en millones de partiditos pequeños, y de ahí uno tenía que luego sumaban, por lo cual era una traslación en el marco electoral pero luego para el Congreso a veces se volvían a unir. Entonces eso afecta más la representación de lo que ayuda.

Lo que ahora se busca es que esas luchas en vez de trasladarse a la elección general se den hacia el interior del partido, pero que al momento de la elección esté todo el partido junto.  

 

Los nuevos

Liendo consideró que en las pasadas elecciones de Congreso, la Unión Patriótica “es un nuevo partido porque hace muchos años que no compite”. En el caso del Centro Democrático, “creo que es el caso de un nuevo partido, hay que ver si se consolida, pero creemos que es un nuevo partido y que va a tener bastante fuerza en curules en el Congreso”.