Una nueva polémica surgió entre el Gobierno Nacional y el Centro Democrático al conocerse la ley de financiamiento que presentó el Gobierno Nacional hace algunos días. Esta vez es la Senadora Paloma Valencia quien indicó que el Gobierno pretende acabar con el régimen simple para el comercio lo que perjudica enormemente a los pequeños comerciantes.
Según dice la parlamentaria que “el régimen de tributación simple le garantizaba a Colombia un recaudo de esos pequeños empresarios, que era cómodo para ellos pero muy importante para el país. Durante el último año se reportó un impuesto de $1.8 billones de pesos”.
De igual manera, Valencia aseguró que “eran más de 150.000 pequeños empresarios contribuyendo a la economía colombiana, y venía creciendo más o menos un 32% adicional. Se suponía que en estos años el crecimiento sería mayor porque se calculaba sobre el doble de la tributación actual en los impuestos que estábamos pagando”.
Escencia de la norma
La senadora del Centro Democrático sostuvo que “se suponía que íbamos a llegar a $3.8 billones de pesos pagados por esos pequeños negocios. Esto no era un tema solo de las grandes ciudades porque la gente colombiana se quiere formalizar y quiere contribuir al Estado colombiano. Más de 1022 municipios ya tenían empresarios inscritos en el régimen simple y el Gobierno de Gustavo Petro quiere acabar con ese régimen”.
Posteriormente, la congresistas señaló que “Ahora, los empresarios pagarían sobre utilidades, tener que pagar contadores, pagar todos los impuestos de manera independiente. Lo que significa que se van a ir, no van a pagar impuestos en Colombia, pero sobre todo, vuelven a esa oscuridad que significa la informalidad. Petro, al eliminar el régimen simple, le cierra las puertas a los colombianos que decidieron contribuir a Colombia. Afectan a esos pequeños negocios, como misceláneas, salones de belleza, peluquerías y tiendas, que quieren salir adelante y encontraron en el régimen simple una manera de ser formales. El cambio…”