Académica dijo que siguen restricciones para que las ciudadanas sean elegidas en cargos de representación
ENS: ¿Qué se podría hacer para que incremente la participación de mujeres en política en los comicios de 2022 y 2023, teniendo en cuenta que la de pasadas regionales no fue la mejor?
ANGÉLICA FABIOLA BERNAL OLARTE: Hay varios frentes de acción, el primero tiene que ver con una lucha decidida de parte de todo el Estado contra la violencia porque creo que en estas elecciones, si bien la jornada electoral se puede decir fue tranquila en la mayor parte del territorio nacional, las campañas previas sí estuvieron muy marcadas por la violencia, y la violencia desatada de una manera particular contra las mujeres.
Entonces no es tan posible hablar de una inclusión política de las ciudadanas cuando esto les trae riesgo para su vida y su integridad, y eso actúa como un factor disuasivo en donde evidentemente nadie va a querer hacer política, hacer campaña, cuando eso implica peligro para su vida.
Entonces creo que eso es algo que hay que tomarse en serio como lo han hecho en otros países, como en Bolivia, por ejemplo, que tiene uno de los porcentajes de inclusión más altos en el mundo de mujeres en política pero porque se han tomado acciones en la lucha contra la violencia y la discriminación.
ENS: ¿Qué otro problema afecta esa participación?
AFBO: Si nos damos cuenta la Ley de Cuotas que tenemos para efectos electorales solo aplica para las corporaciones públicas donde se elige una serie de curules, pero para aquellas elecciones uninominales, es decir, alcaldías, gobernaciones, no hay ninguna herramienta que permita fortalecer la participación de las mujeres. Por eso es que tenemos únicamente dos gobernadoras electas y se estima 120-121 alcaldesas, que no representa mucho más del 10% del país.
Entonces digamos que es todavía como un hueso duro de roer alcanzar estos cargos uninominales como alcaldías y gobernaciones en donde realmente el avance es mínimo. Y pues tiene que ver también con la debilidad de los partidos que cada vez se desdibujan más y que ello permite que haya liderazgos individualistas, estas figuras individuales que se presentan a la política sin partidos.
Ese es un gran obstáculo para las mujeres porque en general la mayor parte de ellas no tienen suficientes recursos económicos y contactos políticos para competir en igualdad de condiciones con los políticos de mayor capacidad.
Finalmente está el tema del sistema electoral que en los cargos plurinominales tenemos bastantes dificultades porque la Ley de Cuotas no se aplica en todo el país, porque está en aquellas corporaciones en donde se escogen más de cinco curules, y eso quiere decir que en más del 60% del país no aplican esas cuotas, y eso nos lleva a que muchas juntas administradoras locales, muchos concejos municipales no tengan una presencia de mujeres, en algunas caos ni siquiera pocas sino que no hay ninguna.
Y es preocupante después de 10 años de la ley que introdujo la cuota en las listas electorales y vamos para 20 años de la otra Ley, la 581, que son las dos herramientas que tenemos en este campo y cuyos resultados son muy regulares.
ENS: De todas formas en las elecciones del pasado 27 de octubre hay hechos significativos como el triunfo en alcaldías de Claudia López en Bogotá y de Virna Johnson en Santa Marta…
AFBO: Claro que esos resultados son bastante positivos en términos simbólicos, también porque eso empieza a mostrar distintas maneras de hacer política, que se puede hacer política más allá de las casas tradicionales, pero a veces eso se toma como un gran triunfo y como si ya se acabaron los obstáculos, y como que ya cualquier mujer puede acceder a unos triunfos electorales tan notables, pero desafortunadamente hay que subrayar que siguen siendo excepciones porque lo que más pasó a lo largo del país fue lo contrario.
Insisto en que esos resultados buenos de manera puntual pues no nos deben hacer perder de vista que son procesos muy particulares que llevan a mujeres de una u otra manera a lograr esos triunfos electorales, pero que de ningún modo se puede extender como una experiencia común a cualquier mujer o que por sí mismo abre las puertas para que otras sigan su camino.
Hay que hacer esfuerzos decididos hacia allá porque no se da de una manera automática.