Durante el debate de moción de censura realizado por la oposición contra la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, por su supuesta cercanía con el sector financiero, en medio del escándalo por sobornos de Odebrecht, la funcionaria reiteró que no está inhabilitada ni tiene intereses particulares en el sector.
“Hemos recibido ataques, injurias y ofensas pero siempre lo hemos hecho con cabeza fría para no responder a ellas (…) Mi hoja de vida, mis actuaciones en cargos públicos y privados, han sido sometidos al escrutinio público, como debe ser”, dijo.
Y continuó: “Nos reiteramos en lo que dijimos desde el día uno cuando me presenté por primera vez a este recinto. No hay nada que pueda constituir una inhabilidad, una incompatibilidad, algo que no esté ajustado a la ley o que me impida desempeñar el cargo de Ministra de Transporte. En mi ejercicio profesional anterior nunca conocí de detalles de Ruta del Sol II. Nunca conocí asuntos relacionados con el Banco de Occidente o de Bogotá, como financiadores de los proyectos de infraestructura.
A su turno, el senador Jorge Enrique Robledo, del Polo Democrático, citante del debate, afirmó que la Ministra actuó en contra “del interés nacional y violó la ley de varias maneras”.
Cuestionó su actuación en “el fallido acuerdo con los bancos del caso Odebrecht. Orozco debe renunciar a su cargo por querer pagar, del erario, la deuda por $1.2 billones del Concesionario Ruta del Sol”.
“¿Por qué ese esfuerzo por ese acuerdo? Nunca debieron negociar con los banqueros, un acuerdo pésimo para los colombianos. Se pueden hacer acuerdos, pero no malos para el país, señora Ministra”, dijo.
Robledo reiteró que Orozco estaba inhabilitada por su supuesta cercanía con bancos. “Creo que el negocio que reconoció la Ministra le da impedimento permanente. ¿Por qué? Porque es un negocio en el que le pagaron durante seis años en pesos de hoy casi $16 millones mensuales. ¿Eso le permite ser objetiva? Por supuesto que no”, sostuvo.
El senador Antonio Sanguino, de la Alianza Verde, respaldó la moción. “Este debate ha surgido porque es evidente una situación de puerta giratoria en relación con las actuaciones de la Ministra de Transporte y la Vicepresidenta. Hemos conocido que ambas funcionarias eran socias de la firma Ramírez y Orozco que tenía como clientes a los bancos que luego resultaron con relaciones crediticias con empresas del mismo holding y participes de la Ruta del Sol II”, manifestó.
Desde los partidos de Gobierno respaldaron a la funcionaria. El senador Ernesto Macías, del Centro Democrático, calificó el debate como un “refrito”.
“Este nuevo debate sobre lo mismo es una estrategia para no permitir que las otras bancadas programen sus debates. Esta es la cuarta sesión plenaria donde se tramita este refrito porque no es otra cosa que un refrito. Aquí las mismas verdades a medias, las mismas cosas sobre una funcionaria honorable, como es la Ministra del Transporte. Se dice que aquí la Ministra actuó con irregularidades. Por Dios, no hay pruebas. La Ministra fue consultora para dar unas conferencias hasta el año 2011”, dijo.
Y agregó: “En este caso ella actuó en favor del interés nacional. Hizo lo que le ordena la ley. Si no lo hubiera hecho aquí estaríamos en un debate de moción de censura por omisión. Entonces malo porque sí, malo porque no. Es una falacia que le otorgó la categoría de terceros de buena fe a bancos cuando esa es una facultad de los jueces de la República, como efectivamente ocurrió”.
A su turno, el senador Efraín Cepeda, del Partido Conservador, afirmó que “esta es la tercera vez que intervengo en un debate sobre las mismas acusaciones. En el tema de la empresa, la Ministra fue consultora del Banco de Bogotá, pero la fecha de la última conferencia la tengo en el 30 de agosto de 2012. En ese sentido las inhabilidades no son de por vida. La gente que ocupa cargos tiene que salir de algún lado. No creo que haya un sector vedado para que la gente ingrese al servicio público”.
Por su parte, el senador Horacio José Serpa, del Partido Liberal, afirmó que el Congreso debería estar atendiendo otros temas. “Insistir en este tema durante cuatro semanas no es sano para el Senado de la República. No podemos quedarnos en este tema. El sector transporte es más que eso. El Senado no debería gastar sus esfuerzos en un tema que se ha venido aclarando. Mientras tanto los problemas del sector continúan”, expresó.