Tras las críticas expresadas por Fernando Londoño al presidente Iván Duque por aceptar la “Conversación Nacional” presionado por la coyuntura del paro, ayer el senador Ernesto Macías censuró las expresiones del exministro y reconoció que desde hace tiempo hay una división en el partido Centro Democrático en torno al pleno respaldo al Jefe de Estado.
Macías, quien fue presidente del Congreso de la República en la pasada legislatura, dijo a La FM que “si usted me pregunta por una división, pues desde hace mucho rato hay una división de un pequeño grupo de radicales, frente a la gran masa del partido. Ese pequeño grupo lo encabeza el doctor Londoño y uno piensa que en estos momentos tan difíciles, no puede haber espacio para esas declaraciones absurdas”.
Agregó el parlamentario uribista que “me parece una irresponsabilidad que a través de un medio nacional exprese sus odios personales contra el Presidente y eso no es responsable con el país (...) Es un momento para apoyar al Presidente y la institucionalidad, como estamos la mayoría, y no para hacer insinuaciones perversas como esas”.
Macías recordó que “desde un comienzo al doctor Londoño le incomodaba la precandidatura de Iván Duque y sigue pues con ese dolor de que sea hoy el Presidente de la República”. Añadió que “yo no sé si algunos están muy aburridos en el partido, pero el doctor Londoño debería buscar un espacio distinto en donde el radicalismo tenga un espacio para pronunciarse y para hacerlo (...) Lo cierto es que sí hay sin duda una división”.
No obstante, Macías destacó el respaldo de Álvaro Uribe, quien es el jefe natural del Centro Democrático, al presidente Duque. “El expresidente Uribe siempre ha respaldado al presidente Duque y al Gobierno. Obviamente como cualquier persona tiene inquietudes y recientemente cuando tenía activa su cuenta de Twitter expresó a través de unos 80 trinos que falta mucho en el país, pero que este Gobierno ha avanzado”, señaló.
Londoño, quien ha sido presidente honorífico del Centro Democrático, señaló el pasado martes en su editorial de La Hora de la Verdad, que “alguien tiene que gobernar. El presidente Duque le haría un gran favor al país pidiendo una licencia transitoria mientras conversa, para que ejerza la Presidencia de la República el Vicepresidente”.
Añadió Londoño que “alguna vez (Duque) tiene que entender que la cosa es con él (…). Del Presidente esperamos claridad (…) que alguna vez entendamos qué demonio es este diálogo que ha convocado de aquí al mes de marzo. Y nos volvemos a preguntar, y entretanto de aquí a marzo, ¿quién gobierna?, ¿quién nos garantiza el ejercicio fundamental de nuestros derechos?, ¿el Presidente pedirá licencia para dedicarse a lo de las conversaciones?, ¿o el Presidente cree que gobernar es oír a todos los que están en la oposición?”.
Tras las críticas de Londoño el partido de gobierno trinó el martes pasado que “el Centro Democrático expresa su respaldo absoluto al presidente Iván Duque y a las decisiones del Gobierno. Confiamos en las instituciones como fortaleza del Estado y en la vía de las soluciones por consenso, en particular para fortalecer la agenda social y la economía fraterna”.
El propio Duque señaló sobre el particular que “no me ponga a contestarle a ciertos personajes que se alimentan de su propio odio. Aquí estamos gobernando con el plan que ganamos la primera y segunda vuelta”. Mientras que la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez señaló frente a las palabras de Londoño que “me parece que en este momento hacer ese tipo de planteamientos es desafortunado”.
Más voces
Luego de las elecciones regionales de octubre pasado la senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, dijo que “la realidad que uno lee es un resultado electoral, y aquí no se puede eximir al Gobierno de responsabilidades de resultados electorales (...). Aquí nos ha hecho falta que el Gobierno se conecte con la base del uribismo, que nos sintamos representados”.
Mientras que el ex viceministro Rafael Nieto dijo hace algunas semanas “percibo en algunos miembros de la bancada en el Congreso, en la dirigencia regional del Centro Democrático y en la base del partido un cierto malestar por la forma en que se desarrolla la gestión del presidente Duque y que hace una evaluación negativa de los resultados obtenidos en las elecciones regionales. Nuestra gente exige cambios en la gestión presidencial y en el partido”.