Cuando se vislumbra un posible acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc, paralelamente toma mayor relevancia el combate contra las Bandas Criminales (Bacrim), en la medida en que toda organización armada ilegal que permanezca después de ese momento, va a ser considerada automáticamente como una Bacrim.
Ante este panorama, el senador del Partido de La U, Juan Lozano, destacó la importancia de que el proyecto que había presentado para atacar con más eficacia a estas organizaciones, se haya acumulado en la reglamentación del Fuero Militar.
En entrevista con EL NUEVO SIGLO el Parlamentario dijo que ante la posibilidad que después de un acuerdo de paz queden disidencias de la guerrilla, es necesario que el Estado combata con toda la fuerza disponible estos reductos.
EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué viene a hacer parte el proyecto para combatir las Bacrim de la reglamentación al fuero militar?
JUAN LOZANO:Hace seis meses radiqué un proyecto de ley que permite que la Fuerza Pública enfrente con contundencia a las Bacrim a pesar de que la Policía ha tenido algunos éxitos. El régimen aplicable hoy es insuficiente y peligroso para el país. El Gobierno tuvo inicialmente indiferencia frente al proyecto y ahora necesariamente lo tiene que acumular con el proyecto de fuero para estudiar también este punto.
EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué toma más relevancia el combate de estas organizaciones?
JL:Si el Presidente Santos logra firmar la paz, no hay ninguna garantía de que en las Farc vaya a haber una desmovilización plena, al contrario hay evidencias que indican que unos frentes de la guerrilla no le marchan al proceso de paz. Si eso se produce, los frentes que no se desmovilicen deben ser considerados bandas criminales y por ende el Estado debe tener toda la fuerza necesaria para combatirlos.
ENS: ¿De qué manera el fuero complementa la iniciativa de lucha contra las Bacrim?
JL:Finalmente un combate eficaz contra las Bacrim por la Fuerza Pública requiere la autorización para enfrentarlas desde el Derecho Internacional Humanitario pero sin darles el tratamiento de parte del conflicto. Entonces hay un tema de régimen aplicable a los miembros de la Fuerza Pública y hay un tema propio de la aplicación del Derecho Internacional Humanitario.
ENS: ¿Esto también va a permitir atacar a las Bacrim en las ciudades?
JL:La idea es que las distintas fuerzas apliquen de manera razonable, racional y proporcional su capacidad. Obviamente, bombardear un barrio en Bogotá, Medellín o Cali, sería un despropósito casi criminal, pero enfrentar bandas criminales que disponen de armas largas de capacidad letal en zonas rurales, necesita instrumentos distintos de esos que usan los policías para combatir a los delincuentes de barrio.
ENS: ¿Pero eso daría pie para que a las bandas criminales se les va a aplicar el DIH?
JL:A las Bacrim se les debe combatir con todos los instrumentos que tenga el Estado, pero entendiendo que son delincuentes comunes y ordinarios que no deben tener tratamiento ni de parte del conflicto ni estatus de beligerancia. Esto por remisión expresa de la Ley que indican que los miembros de las Bacrim son delincuentes comunes y no deben recibir nunca tratamiento político y que sus integrantes no pueden someterse a la desmovilización ni a las figuras que contempla la ley para las guerrillas.
ENS: ¿Por qué serían más peligrosas las disidencias después de firmarse la paz?
JL: Yo me pregunto si mañana se firma la paz con las Farc y no entregan los misiles que hoy tienen en su poder, ¿cómo los quieren combatir? ¿Con la Policía? Para todo eso tiene que servir el proyecto. Este proyecto va enfocado a que por una mala desmovilización de las Farc no se produzcan peores secuelas para el país.
Descarta informe de posconflicto
El senador desvirtuó el informe sobre la visión del posconflicto por parte del Ministerio de Defensa presentado en un informe de un noticiero de televisión el lunes pasado.
Sobre los 18 billones de pesos para atender esta etapa y sus inversiones, el Congresista lo calificó de ridículo.
“La información sobre la aproximación del Ministerio de Defensa sobre el posconflicto es por lo menos ridículo, lo que mostraron ni siquiera cuadra en las cifras. Hablan de 18 billones de pesos y dicen que el Ejército tendrá 4 mil millones y la Policía 2.600 millones.