En diálogo con EL NUEVO SIGLO, Carlos Camargo Assis dice que el narcotráfico es un mal mayor que hay que atacarlo para debilitar todos los problemas que se desprenden de esa actividad criminal.
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué les dice a las organizaciones que han convocado las jornadas de protesta?
CARLOS CAMARGO ASSIS: La protesta social es un ejercicio legítimo consagrado en la Constitución y que debe ser garantizado. Pero es necesario que se tenga en cuenta la conveniencia sanitaria del momento. Los convocantes deben ser los primeros interesados en proteger la integridad y la vida de las personas que comparten sus puntos de vista. No es oportuno exponer a las personas en un momento en que el sistema hospitalario está colapsado.
ENS: ¿Cree importante cuanto antes un diálogo social?
CCA: El diálogo es la esencia de una democracia. Es la forma de avanzar mediante acuerdos construidos con argumentos. La Defensoría siempre será abanderada del diálogo porque creemos en él y sabemos que es el camino para cohesionarnos y avanzar como sociedad.
ENS: ¿Cuál es la situación de los líderes sociales, los siguen asesinando?
CCA: Los líderes sociales siguen en riesgo porque son un obstáculo para las economías criminales presentes en algunos territorios. Las personas que ejercen una vocería de la comunidad y que señalan riesgos para esa misma comunidad, se vuelven adversarios de los criminales que no quieren disensos ni argumentos en los territorios donde delinquen. Hay que combatir esas expresiones criminales para crear un marco de tranquilidad para los líderes de las distintas comunidades.
ENS: ¿Cuál es la situación del Cauca?
CCA: El Cauca está viviendo una concurrencia de factores que son la causa de muchas violaciones de derechos. En Caloto y Argelia se vive una situación muy difícil que hemos advertido a través de muchas alertas tempranas. El Cauca atraviesa una coyuntura que debe incentivar la acción de toda la institucionalidad.
Hemos evidenciado desplazamiento forzado, amenazas, cultivos ilícitos de coca y marihuana, grupos armados ilegales, narcotráfico y muchas solicitudes por parte de las comunidades de presencia de la fuerza pública.
ENS: ¿Se están desatendiendo las alertas tempranas?
CCA: Cada alerta temprana genera el desafío por parte de la institucionalidad de movilizarse para no permitir que el riesgo advertido se consume. Hay riesgos que tienen unas complejidades mayores, así como alertas que generan una movilización más eficiente que otras. El reto que tenemos es generar recomendaciones que resulten adecuadas para atender todos los riesgos y que todas las alertas se atiendan con la misma efectividad siempre. Estamos trabajando en ese sentido.
ENS: ¿A qué se debe el aumento del desplazamiento y confinamiento?
CCA: Se debe a que la presencia de grupos criminales y las luchas entre ellos ha aumentado en algunas zonas del país. Esos grupos son fuente de criminalidad y de temor por parte de las comunidades.
ENS: ¿Qué información tiene la Defensoría sobre presencia de carteles mexicanos en Cauca y Nariño?
CCA: La criminalidad no reconoce nacionalidades sino intereses criminales. Esa presencia es una realidad y se concreta en vínculos con disidencias, grupos armados ilegales y carteles de tráfico y microtráfico de narcóticos.
ENS: ¿Reanudación de fumigaciones aéreas con glifosato podría disparar paros en algunas zonas, incluso presionados por los narcos y grupos armados ilegales?
CCA: Las responsabilidades de Gobierno nunca son elegir entre el bien y el mal, eso sería fácil, el problema es que muchas veces hay que elegir entre un mal mayor y uno menor. En esta oportunidad el mal mayor es el narcotráfico y el enorme poder que está acumulando como consecuencia de las grandes extensiones de cultivos que han logrado. Hay que atacar esos cultivos para debilitar todos los problemas que se desprenden de esa actividad criminal.
ENS: ¿La disminución del hacinamiento carcelario sí ha contribuido a que disminuya la crisis en los penales?
CCA: Está ayudando. Debemos seguir trabajando para que las personas privadas de la libertad tengan las garantías a las que tienen derecho y se facilite la resocialización que se busca con la pena.
ENS: Una agencia de la ONU denunció que se disparó el tráfico de migrantes, sobre todo niños, por el Darién ¿Qué hace la Defensoría?
CCA: Precisamente nosotros hemos denunciado ese fenómeno. Esa es una situación grave que debe ser atendida con todo el vigor de la institucionalidad nacional e internacional. Son crímenes que afectan menores y eso no se puede permitir.
ENS: ¿Qué responde a quienes dicen que el Defensor del Pueblo poco se ve y relacionan esa circunstancia con inacción de la entidad?
CCA: La Defensoría del Pueblo no ha parado un día de atender las necesidades de quienes más nos requieren. Nuestro trabajo en los territorios nos brinda la visibilidad institucional que requerimos y no una visibilidad personal. Estamos tratando que la gestión se vea por la eficacia colectiva y no por la capacidad mediática del coyuntural Defensor de turno.