"Improvisar respuestas y casar conflictos, problemas del Gobierno" | El Nuevo Siglo
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Jueves, 5 de Marzo de 2020
Redacción Política

Experto en marketing político, Angel Becassino, considera que no hay una estrategia de comunicación adecuada

 

EL NUEVO SIGLO: ¿Tiene problemas el gobierno Duque para comunicar sus políticas y ejecutorias?

ÁNGEL BECASSINO: Es un Gobierno que no tiene una estrategia de comunicación. Hay otros gobiernos que no han tenido buena estrategia de comunicación pero han tenido criterio cuando responden a un conflicto, a una crisis que se arma.

El Gobierno tiene un problema, que improvisa respuestas y sale atropelladamente a casar conflictos que no le convienen. Creo que no hay una estrategia de comunicación en el Gobierno, probablemente haya gente contratada para eso, pero lo que están haciendo lo están haciendo mal o no le hacen caso a quienes deberían hacerle caso.

ENS: Los consejos comunitarios de Uribe fueron muy exitosos para la imagen positiva del entonces presidente, ¿por qué, aparentemente, no ha sucedido lo mismo para Duque con los Talleres Construyendo País?

AB: Es un buen instrumento, pero como cualquier otro depende de quién lo ejerza. En el caso de Uribe había una persona que emanaba un tipo de autoridad muy diferente a la que emana el presidente Duque. El instrumento es el mismo y es válido, pero depende de quién lo utilice y el resultado es uno o el resultado es otro. Creo que en la actualidad el resultado de este instrumento no es el que se propuso alcanzar el actual Presidente.  

ENS: Si bien, la imagen favorable de Duque no es la mejor por estos días, sin embargo, a nivel internacional tiene alta figuración.

AB: El problema es que el presidente Duque buscó un protagonismo en un tema del que mucha gente está hablando internacionalmente, gente de peso, en la misma dirección del presidente Duque. Quiero decir, hay una especie de gran coro manifestándose contra los problemas que todos conocemos origina el régimen de Venezuela. Entonces, no es que él tenga un papel de alta figuración.

En gran parte, es uno más con una condición excepcional y es que Duque preside el país que está pegado a Venezuela. Entonces eso genera un montón de nuevos espacios, entre los cuales hay unos inconvenientes como es la ruptura de relaciones diplomáticas con su principal vecino y su segundo, durante muchísimos años, socio comercial.

Me parece que ahí, también, uno está observando que no hay una política de relaciones muy bien concebida. Están protagonizando una pelea sin evaluar el tiempo que va a durar. Creo que el presidente Duque se embarcó en esa pelea recomendado por algún asesor o alguna cosa por el estilo que era de corto plazo y que  Maduro se iba a caer rápido, sin evaluar que lo de Maduro es un régimen militar que ha instalado y creo que no va a tener un desenlace tan rápido como desearía mucha gente. 

ENS: ¿Ayuda a la imagen del presidente Duque la nueva cara del gabinete que a cuentas gotas ha ido remozando?   

AB: Me parece que tuvo oportunidades de darle oxígeno a su Gobierno con cambios, pero los más relevantes en realidad no fueron cambios sino de posiciones para personas que ya estaban en el grupo ministerial. Entonces no veo que haya significado esa oxigenación la que  buscaría el Gobierno, que relativamente tiene un desgaste de un año y pico.  

ENS: Se espera nueva oleada de protestas contra el Gobierno, ¿qué tanta fuerza podrían tener considerando que de antemano el Presidente ha desarrollado una Conversación Nacional con distintos sectores?

AB: Me parece que el paro ese que excedió en mucho a su comité de paro ocurrió en una época en que luego venía el fin de año que amortiguaba esto, como realmente ha ocurrido. Que la política que en ese momento puso en juego el Gobierno pensándolo un poco maquiavélicamente, digamos, que fue ganar tiempo, fue efectiva, le sirvió al Gobierno.

Realmente el paro en este momento no ha agarrado la fuerza que tuvo porque se enfrió, sin embargo, hay motivos por los cuales se produjo, en parte, el problema de ese paro era que habían demasiados motivos, ciento y pico de reivindicaciones en algún momento llegaron a mencionar. Entonces es un paro que  no tiene un vértice claro, sin embargo, vuelvo al punto, me da la impresión, no creo que en marzo, pero probablemente sobre abril o mayo agarre fuerza porque hay muchas condiciones de las que movieron a que se produjera ese paro que  no han sido resueltas.

Lo que no es claro es si el Gobierno, en esos tiempos que gana, los utiliza para planificar qué va a pasar ahora cuando se presente nuevamente el problema.