Objetar la totalidad de la reforma a la justicia le recomendó al Gobierno el exministro Jaime Castro.
Para él, hasta el momento no se ha justificado la creación del Ministerio de Justicia, porque fue creado para defender una política de Estado frente al tema de la justicia, que es precisamente lo que ha faltado en esta coyuntura.
Castro recordó que las objeciones del Gobierno a la reforma a la justicia no las pueden estudiar en sesiones extras, sino en las ordinarias.
EL NUEVO SIGLO: ¿La reforma a la justicia está vigente?
JAIME CASTRO:No está vigente porque no ha sido sancionada por el Gobierno. No ha sido publicada.
El Gobierno por el contrario ha anunciado que la objeta. No se sabe si será objetada total o parcialmente. Pero ya existe un pronunciamiento del Gobierno en el sentido de que objetará el proyecto que aprobó el Congreso.
Entonces no está en vigencia.
ENS: ¿Entonces el Gobierno sí puede objetar un acto legislativo?
JC:Sí, claro que lo puede objetar. Además yo no recuerdo exactamente el número del acto legislativo, pero creo que fue José Vicente Concha o Marco Fidel Suárez quien objetó un proyecto de acto legislativo.
No es frecuente, porque el Gobierno siempre participa en el trámite de los actos legislativos.
En este caso el Ejecutivo estuvo de acuerdo, porque el Ministro pidió el voto, pero como se equivocó el ministro de cayó. Es la razón por la cual se cae.
ENS:¿Esto no afecta la relación entre el Gobierno y el Legislativo?
JC:No, yo no creo. El Congreso es gobiernista. Los congresos suelen ser gobiernistas.
Aunque no hayan sido elegidos por el Presidente del momento, terminan apoyando al Presidente, porque los congresistas en su mayoría juegan al apoyo oficial, un nombramiento o un contrato o una partida en el presupuesto.
ENS: ¿La objeciones a la reforma a la justicia se pueden estudiar en sesiones extras?
JC:La Constitución es expresa cuando dice que las reformas constitucionales solo se tramitan en sesiones ordinarias, no se pueden tramitar en sesiones extraordinarias.
Ese es otro error del doctor Simón Gaviria que está solicitando sesiones extras para una reforma constitucional.
Hay que decir que él ni lee los informes, pero tampoco lee la Constitución.
ENS: ¿Debe continuar como presidente del Partido Liberal?
JC:Pues yo creo que Juan Carlos Esguerra, que se equivocó en materia grave, asumió su responsabilidad. Espera uno que el doctor Gaviria haga lo propio.
ENS: ¿Cuál es la solución entonces?
JC:Lo primero que tienen que hacer el Gobierno es objetar todo el proyecto que aprobó el Congreso, porque si lo hace parcialmente entra en una etapa de negociación y el Gobierno no debe negociar la reforma a la justicia. Por eso terminó en lo que terminó este proyecto, porque empezaron a negociar y a darles gusto a los magistrados, a los congresistas.
Y por eso debe objetar todo y definir luego que es lo que quiere y presentar el proyecto correspondiente.
ENS: ¿No cree mejor una constituyente al sistema judicial?
JC:Creo que se necesitaría una constituyente para muchos temas, porque el Congreso ha vuelto colcha de retazos la Constitución de 1991. Ha hecho 35 reformas, la inmensa mayorías de ellas no necesarias.
Se necesita una reforma tributaria para la justicia, para el tema territorial, para la reforma política.
Pero el tema de la constituyente tiene dos inconvenientes. De un lado, los requisitos son muy altos por: primero se necesita una ley, luego una aprobación ciudadana en las urnas con un quórum electoral muy alto. Y han politizado el tema en la medida que dicen que la constituyente la hacen para que el expresidente Álvaro Uribe vuelva la Presidencia y por eso no es viable en las circunstancias actuales.
Ministerio de Justicia
“Sevolvió a crear el Ministerio de la Justicia, precisamente para que definiera la política del Estado frente a la Rama Judicial de cara a la Nación, al Congreso, ante el país y hasta el momento está fracasando”, consideró Castro, agregando que “este Ministerio no ha hecho lo tenía que hacer. Antes lo fusionaron porque decían que un Ministro no podía solo dedicarse a mirar el tema de las cárceles”.
Tras reiterar que “hasta el momento no se ha justificado la creación” Castro precisó que el hecho de “que haya fracasado hasta el momento no quiere decir que se tenga que cerrar”.
Para Castro, “de Ministro hay que conseguir a alguien que sepa de administración de justicia, que tenga capacidad para definir una política en esa materia”.