El senador liberal asegura que cuando comiencen las sesiones del Congreso citarán al representante legal de la empresa que obtuvo irregularmente esa tecnología de Estados Unidos.

En enero iniciará labores formales la comisión accidental que creó el Senado para averiguar la ubicación y el estado de los equipos que adquirió de manera irregular por parte de Estados Unidos el gobierno de Álvaro Uribe para realizar las interceptaciones, indicó el presidente de esa comisión Juan Manuel Galán.
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué ha hecho la comisión del Senado encargada de investigar dónde están los equipos de las ‘chuzadas’ traídos desde Estados Unidos?
JUAN MANUEL GALÁN: La comisión se conformó y en cualquier momento de enero va a hacer la visita que tenemos prevista al lugar donde estarían almacenados estos equipos, para poder verificar en qué estado están y quién tiene su custodia, y verificar si estos equipos han sido usados o no, si están inservibles o si están en condición de ser utilizados. Entonces, cuando reinicien las labores del Congreso, porque no hubo realmente tiempo para esto, la idea es poder tener en la comisión al representante legal de Colvista, que es la empresa responsable de ejecutar todo este contrato con el DAS, para que testifique ante la comisión, pues las comisiones constitucionales permanentes tienen facultades de indagación que nos permiten citar a particulares, y responda un cuestionario por estos equipos. Pero la visita que va a hacer la comisión accidental la vamos hacer en enero.
ENS: ¿Hasta el momento tienen algún dato específico que les permita inferir dónde están esos equipos?
JMG: No sabemos nada más, pero lo que sabemos es que esto ha sido un problema más embarazoso, diría yo, para los Estados Unidos que para Colombia, porque estos fueron unos equipos que fueron autorizados por el Departamento de Estado, que es el que da la autorización para que equipos de Inteligencia y de defensa sean exportados a cualquier país. Entonces, la licencia y el permiso se otorgaron aparentemente para unos equipos que no funcionaron o que no se pudo ejecutar adecuadamente el contrato, además con serias irregularidades presuntas, que ya hacen parte de una investigación penal y disciplinaria que están adelantando tanto la Fiscalía como la Procuraduría y la Contraloría.
ENS: ¿Quedó contento con la elección de Simón Gaviria como presidente del Partido Liberal, o hubiera preferido una dirección colegiada?
JMG: Desde hace muchos años, antes que llegáramos a esta decisión, he defendido la dirección única, porque creo que es la manera de visibilizar el Partido, de tener un liderazgo fuerte, coherente, disciplinado, una cabeza que va hacia el norte, con rumbo, y yo soy enemigo de las direcciones colegiadas. Creo que la experiencia que ha vivido el Partido Conservador ha mostrado lo nefasto que puede resultar para un Partido político tener una dirección colegiada. Por eso, yo celebré la decisión que se tomó en el Convención liberal de escoger jefe único, y el hecho de que se haya escogido a Simón Gaviria es un mensaje también de renovación, de posibilidad de participación de las nuevas generaciones, de los nuevos liderazgos dentro del Partido, y yo estoy seguro que Simón Gaviria va a hacer una gran labor en este período como jefe único. La primera responsabilidad que va a tener es la organización del Congreso programático que está previsto para mayo o junio del año entrante.
ENS: ¿Qué impresión le dejó el texto de la conciliación de la reforma la Justicia que se aprobó en el Congreso?
JMG: La reforma a la Justicia debe tener como hilo conductor o eje principal: la demanda y no la oferta de justicia, es decir, qué es lo que en Colombia hoy dificulta que el ciudadano pueda acceder a la Justicia, para obtener una justicia pronta, razonable en costos, imparcial, que falle las providencias con total autonomía, independencia y objetividad. Ese espíritu de la reforma, me parece que en lo que queda de los debates, hay que hacer todo lo posible por recuperarlo, porque no se puede volver la reforma algo mecánico, simplemente operativo de cambiar unas competencias aquí o allá, cambiar mecanismos de elección o extender períodos de edad de retiros forzosos para los magistrados, porque eso realmente no termina beneficiando al ciudadano.