La Defensoría del Pueblo, en el marco del Día Internacional de la Mujer Indígena, hizo un reconocimiento de la vulnerabilidad, acentuada por las condiciones estructurales de desigualdad, que dificulta la garantía plena de los derechos y el acceso a la educación, la salud y la justicia de las mujeres nativas.

Así mismo, la entidad indicó que este grupo poblacional ha sido especialmente afectado por el conflicto armado y por las violencias basadas en género.

En este escenario, reiteró el llamado al Gobierno nacional para que se profundicen las acciones encaminadas a garantizar plenamente los derechos a las mujeres indígenas. La Defensoría dijo que se requiere proponer y concertar mecanismos orientados para reparar las exclusiones históricas de las que han sido víctimas.

En este sentido, resaltó positivamente el reciente nombramiento de Leonor Zalabata, una lideresa arhuaca, como embajadora ante las Naciones Unidas. "La Defensoría del Pueblo confía en que desde allí se impulsen las políticas dedicadas a la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, especialmente en el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, encaminada a acelerar la consecución de la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas", sostuvo la entidad. 

Asimismo, valoró el nombramiento de una mujer emberá como directora de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, esperando que su visión aporte a las reflexiones en torno a la reparación integral de las víctimas étnicas y de las mujeres indígenas, a diez años de promulgados los Decretos Leyes.

El 5 de septiembre de 1983 se celebró por primera vez el Día Internacional de la Mujer Indígena, iniciativa que surgió en el marco del Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América llevado a cabo ese mismo año en Tiahuanaco, Bolivia.

A lo largo de estas casi cuatro décadas, esta conmemoración ha reafirmado el reconocimiento de las mujeres como sujetos fundamentales para la pervivencia de la cultura de sus pueblos, ha puesto en evidencia las múltiples manifestaciones de discriminación que sufren y ha valorado sus luchas contra estas manifestaciones y a favor de sus derechos individuales y colectivos.

Incidencia

Junto a la Corporación Comunidad de Juristas Akubadaura y como integrante del Programa de Mujeres de la Mesa Indígena del Chocó, Alba Quintana ha fortalecido sus conocimientos no solo para su liderazgo sino también para incidir en espacios de fortalecimiento político con las mujeres de su comunidad, entre ellos el litigio estratégico para la defensa del territorio ancestral y fortalecimiento para la incidencia política en espacios locales y departamentales, logros que ha dejado todo el proceso.

“Las mujeres indígenas somos parte fundamental de nuestros pueblos. Nuestra sensibilidad política y participativa es importante y cada vez avanzamos más en nuestros liderazgos”, contó Quintana. Hoy, en el Día Internacional de la Mujer Indígena, esta líder toma la palabra: “Las mujeres indígenas facilitamos la vida digna, las sonrisas y la alegría en nuestros territorios. Nuestra apuesta es por la paz”.

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La experiencia

“Hace 16 años llegué a vivir a Quibdó. No fue fácil, para nada fácil. La comida, la cultura, la forma de vestirse…todo es distinto cuando una viene de un pueblo indígena. Llegué desplazada por el conflicto armado desde Juradó. En esa época eran dos los grupos armados que tenían el poder del territorio, ahora ya perdimos la cuenta de cuántos son”, narró Quintana.

“La semilla del liderazgo me la sembró mi mamá: ella se abrió camino dentro de los liderazgos de nuestra comunidad, que eran muy varoniles. Así que cuando salgo de mi territorio por la violencia que estábamos viviendo llego en el 2003 a Quibdó. Mi proceso de liderazgo comenzó en grupos juveniles y organizaciones de mujeres. Esto me llevó a liderar el primer Congreso de Mujeres Indígenas en el 2016 y comencé a hacer parte del Programa Departamental de la Mesa Indígena del Chocó”, expresó.

“El reconocimiento que hemos avanzado las mujeres indígenas en el Chocó frente a nuestras propias autoridades ha sido inmenso, y ProDefensoras nos ha ayudado en esa tarea: hemos fortalecido nuestras capacidades de liderazgo, hemos tenido más y mejor acceso a información importante para nuestra incidencia política”, sostuvo. Su historia fue destacada por la ONU.