El juzgamiento en segunda instancia a congresistas es una de las cosas que el ex magistrado Carlos Gaviria destaca del trámite que está surtiendo la Reforma a la Justicia en el Congreso.
Sin embargo, Gaviria dijo que hay elementos que no comparte y que están incluidos en el texto que está aprobado actualmente, entre los que están la ampliación del período de los magistrados, al cual califica de “absolutamente inútil”, y la delegación de funciones jurisdiccionales a notarios y abogados.
Gaviria también habló sobre la participación que tendrá en el Congreso Ideológico que próximamente desarrollará el Polo Democrático, evento que él presidirá.
EL NUEVO SIGLO: ¿La reforma cumple con el fin último de descongestionar la Justicia?
CARLOS GAVIRIA:No he tenido ocasión de hacer un seguimiento en detalle, pero lo que puedo decir es que el contenido está muy lejos de satisfacerlo, cuando los colombianos lo que esperaban era una reforma que les permitiera a los ciudadanos acceder con mayor facilidad a la administración de justicia y esperar una justicia pronta y cumplida, como dice la Constitución. El núcleo se ha convertido más bien en de qué manera debe juzgarse a los congresistas para que no vayan a correr el riesgo de ser sancionados, o cuál debe ser el período de los magistrados. Me parece que la reforma se ha entretenido en cosas secundarias que no eran las que el país esperaba.
ENS: ¿Qué puntos se salvarían de la reforma?
CG:Me parece que hay uno que es importante, pero dentro del contexto que le digo sería secundario, pero es importante y es que se reconozca el derecho que tienen los congresistas a una segunda instancia de juzgamiento. Pero eso ha podido hacerse sin tanto bombo y platillo y me parece que las expectativas que había generado y la ciudadanía colombiana van a quedar francamente insatisfechas.
ENS: Hay un punto polémico que le da atribuciones a los abogados y notarios. ¿Eso afectaría la autonomía de la Rama?
CG:A mí no me gusta eso, no me gusta, de ninguna manera. A mí me parece que la función del juez no puede ser arrebatada y que al juez en su función no debe sustituirlo nadie transitoriamente.
ENS: ¿Es buena o mala la idea de ampliación del periodo de los magistrados?
CG:Es absolutamente inútil introducirlo allí tan deliberadamente como para halagar a los magistrados entre un periodo de 8 años y uno de 12, es imposible saber cuál de las dos cosas es mejor y si va a regir hacia adelante o si solamente para los magistrados que en adelante sean elegidos. Me parece que es una decisión supremamente superflua en una reforma a la Justicia de esa naturaleza; entonces, lo que puede inquietar a mucha gente es que los magistrados deben ser vitalicios, o deben ser removidos permanentemente.
ENS: ¿Pero es bueno o no un período de ocho años?
CG:Me parece que el de ocho años es un buen periodo por dos razones: primero, da seguridad de un periodo suficiente como para que la Corte vaya consolidando líneas jurisprudenciales. Y segundo, dará oportunidad a personas más jóvenes para que también desempeñen esos cargos, que nadie se eternice en su cargo y menos en la magistratura.
ENS: ¿Era necesario que las Cortes hubieran estado en la mesa de diálogo con el Congreso?
CG:Me parece que deben opinar, porque desde luego por la autoridad que tienen, generalmente las personas que llegan a estos cargos son personas con una buena experiencia jurídica, un buen conocimiento. Pero yo soy más partidario de que las personas que van a ser beneficiadas o perjudicadas estén un poco más al margen de la discusión.