Tras el breve secuestro del presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, el domingo, así como las situaciones que se han presentado en los últimos días en el vecino país, hay quienes creen que la solución está en sacar a Nicolás Maduro del mandato, mientras que otros opinan que son asuntos internos y por ende Colombia no se debe inmiscuir.
El senador Álvaro Uribe, del Centro Democrático, aseguró que lo que sucedió con Guaidó muestra que “la tiranía venezolana ha secuestrado a la democracia, a la empresa privada y ahora secuestra lo que queda de actores de la democracia”.
Frente a ello, manifestó que la única manera de recuperar la democracia es que los militares venezolanos se rebelen contra Maduro para sacarlo del poder. “Lo único que soluciona ese secuestro continuado es que las Fuerzas Armadas encarcelen a la dictadura y permitan unas elecciones transparentes para que Venezuela retome el rumbo democrático”.
Sin embargo, el senador Julián Gallo (Carlos Antonio Lozada), del partido Farc, le manifestó a EL NUEVO SIGLO que lo que sucedió con la retención de Guaidó en Venezuela “es una situación que deben resolver los venezolanos” y que esa precisamente ha sido la posición de su colectividad, tras considerar que la postura del Gobierno colombiano “ha sido totalmente errada” en este tema.
Señaló que son “sumamente irresponsables”, las declaraciones del senador Uribe al incitar a los militares venezolanos a que saquen del poder a Maduro y a que promuevan unas nuevas elecciones, debido a que, según Gallo, “violan entre otras cosas, los principios básicos del derecho internacional humanitario, la no intervención en asuntos internos de otros países. Nosotros llamamos al respeto de las normas básicas del derecho internacional”.
“Imagínese un gobierno de un país vecino pidiendo que intervengan a Colombia, que den un golpe de Estado porque ya han asesinado más de 400 líderes sociales en los últimos dos años después de la firma del Acuerdo de Paz, o porque ya han asesinado a más de 85 integrantes del partido Farc después de la firma”, agregó.
Por último, aseguró que Colombia debe continuar sus relaciones con el vecino país. “Nosotros hemos hecho ya un pronunciamiento que no es posible la ruptura de relaciones entre dos países y dos pueblos hermanos, porque los únicos que van a salir perjudicados son los más de 4 millones de colombianos que viven en Venezuela y los más de 1 millón de venezolanos que hay actualmente en Colombia”, sostuvo.