El director ejecutivo de la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), Jonathan Bock Ruiz, dijo frente al papel que cumplen los medios en estas elecciones que los candidatos deben mantenerse abiertos al escrutinio.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo ha visto la FLIP las garantías a la prensa para el cubrimiento de las elecciones? 

JONATHAN BOCK RUIZ: Pues precisamente sacamos un comunicado, con otras organizaciones de América Latina, expresando nuestra preocupación por los ataques y mensajes estigmatizantes que ha habido contra la prensa en general por parte de las dos campañas que están en disputa.

Pero también, como lo hemos visto a lo largo de toda la contienda electoral, esto no solamente ha tenido un impacto en el nivel de agresividad en el contenido de los mensajes en las redes sociales sino que ha tenido unas declaraciones y unas acusaciones dirigidas a algunos medios, y esto por supuesto sucede después de que ocurran publicaciones o entrevistas que, según las campañas, afectan sus propios intereses. 

Todo esto deteriora las garantías que deben tener los periodistas para hacer su trabajo y genera un ambiente de autocensura.

ENS: ¿Se ha manifestado la Procuraduría sobre el particular? 

JBR: No, y hemos hecho un llamado para que la Procuraduría tome un rol más activo, al igual que la Defensoría, de hacer llamados a los partidos políticos y a las autoridades, como el Consejo Nacional Electoral, para que sean los movimientos quienes tengan que adoptar un mensaje favorable, pero también las medidas y los correctivos necesarios cuando se presentan estos ataques por parte de las campañas. 

Si eso no funciona, estamos hablando de que no hay una responsabilidad posterior a estos actos de estigmatizaciones, y eso  lo que termina generando es una permisividad para que las figuras públicas sigan cuestionando sin fundamento las publicaciones periodísticas.

ENS: ¿Se han dado en las regiones garantías para la prensa en estas elecciones? 

JBR: A nivel nacional lo que hemos destacado es que sí ha habido un aumento de las amenazas en estos primeros meses del año. Documentamos que hay un incremento del 60%, si lo comparamos con la campaña del 2018. No directamente relacionado con cubrimiento de temas electorales; esto está más relacionado con el cubrimiento de orden público y de corrupción administrativa, pero de todas maneras no siempre es tan fácil desligar las contiendas electorales de estas coyunturas y estas situaciones.

ENS: ¿Si hay comunicadores parcializados en su trabajo con candidatos en estos comicios es una falta a la ética informativa? 

JBR: Pues esto debe ser una discusión al interior de los medios de comunicación y del periodismo o de lo que llamamos el ecosistema de medios de comunicación, de las organizaciones, de las universidades, y se debe dar una discusión y una reflexión sobre cuáles son los límites que tienen los medios a la hora de informar. Cuál es también la responsabilidad que se tiene, sobre todo en un periodo de elecciones.

Pero no les compete a los candidatos ni a las campañas políticas identificar quién está haciendo buen o mal periodismo, porque son estas figuras las que tienen la mayor responsabilidad y tienen unas obligaciones de mantener un discurso favorable, de mantenerse también sujetos al escrutinio.