Con 29 votos en contra fue rechazada la recusación que presentó la bancada de Cambio Radical a tres de los cuatro concejales del Polo, por lo que cuando se debata y vote el proyecto de Acuerdo mediante el cual la Administración Distrital vuelva a solicitar el cupo de endeudamiento para la reactivación económica y la ejecución del Plan de Desarrollo, podrán participar.
Este fue uno de los últimos temas que despachó el Concejo de Bogotá en las sesiones ordinarias, que concluyeron ayer, y ahora el cabildo distrital tendrá que sacar adelante durante las sesiones extraordinarias, los dos proyectos de acuerdo que tanto revuelo despertaron durante los últimos días, y que de alguna forma concluyeron con una disculpa por parte del Secretario de Gobierno, al Cabildo Distrital.
“Pido excusas a quien haya ofendido y propongo pasar la página para enfrentar juntos la crisis que vivimos”, precisó el secretario Luis Ernesto Gómez, quien dicho y hecho ayer, poco después de que se despachara la recusación, agradeció por su trabajo al Concejo.
“Con 29 votos fue negada la Recusación contra los Concejales del Polo Democrático. Agradecemos a todas las bancadas el juicioso estudio de la recusación. Esperamos que esta decisión dé tranquilidad al partido de Cambio Radical, para avanzar en un debate constructivo del cupo de endeudamiento”, trinó ayer al finalizar la tarde el secretario de Gobierno.
Un problema de coherencia
Ahora bien, ¿cuáles fueron los principales interrogantes e inquietudes por parte de todas las bancadas, frente a la recusación al Polo Democrático? Por una parte, y tomando como interrogante central si la denuncia de los concejales hecha el año pasado, cuando eran bancada de oposición, es hoy un conflicto de intereses, la mayoría de los cabildantes concluyeron que no lo es.
No obstante, casi la totalidad de los concejales que votaron, aún de quienes votaron no, se refirieron a la falta de coherencia por parte del Polo Democrático, e hicieron especial referencia a la ponencia positiva del concejal Argote.
A este respecto el cabildante del Centro Democrático que voto sí a la recusación, Andrés Forero, dijo que en el debate de ayer hubo divergencia en términos jurídicos, “pero en donde hubo un acuerdo casi unánime, es en la incoherencia política monumental por parte del Polo”.
“Hay que respetar las posturas y las argumentaciones de lado y lado, pero en donde no hay ni hubo discusión, fue sobre la incoherencia política del Polo Democrático Alternativo. A mí me cuesta mucho entender cómo es posible que ellos tengan demandada a la Primera Línea del Metro de Bogotá, y se corra el riesgo de que ese proyecto se dañe y no pueda seguir adelante, y al mismo tiempo hayan presentado una ponencia positiva y estén interesados en votar recursos para la extensión de esa primera línea del Metro”, le aclaró a EL NUEVO SIGLO el concejal Forero, quien añadió que si ellos ganan la demanda de nulidad que tienen no se podría hacer la Primera Línea, pese a que aprobarían recursos para la segunda.
“Es un despropósito cuando una persona demanda la edificación del primer piso de un edificio, pero aprueba recursos para la construcción de una segunda planta”, finalizó el concejal empleando esta metáfora, de la que también hizo uso la concejal Bastidas.
Por ejemplo la concejal Heidy Sánchez de la Colombia Humana-UP, colectividad política que siempre se ha manifestado en contra del Metro elevado, aunque votó no a la recusación, precisó en su intervención que la coherencia política cuesta.
“Yo aprecio muchos a mis colegas de la bancada del Polo Democrático pero esto no es coherencia. La segunda línea del Metro que va hasta Suba y Engativá va a tener la misma suerte que la primera línea del metro elevado. Serán aprobados más de $780.000 millones para seguir beneficiando a Transmilenio. Ahí es donde está el asunto y la discusión”, dijo durante la sesión plenaria la cabildante Sánchez.
Critican a la plenaria
Finalmente, el concejal del Polo, Manuel Sarmiento, quien se tuvo que mantener al margen del debate (al igual que los demás concejales del Polo, rechazó la “bajeza” con la que varios concejales lo que hicieron fue un debate de control político a su partido, “mientras estábamos ausentes de la sesión”.
Este miércoles concluyeron las sesiones ordinarias del Concejo con la discusión de la recusación de Cambio Radical.
“Quiero rechazar la bajeza de varios de ustedes. No puedo decir que me sorprende la bajeza pero así no se hacen los debates. Yo no digo que no nos puedan cuestionar o criticar, pero hacerlo aprovechándose de que no estamos en la sesión es bien bajo”, precisó el cabildante.