El senador Wilson Arias, del Polo Democrático, anunció que llevará nuevamente al Congreso el debate sobre la apropiación irregular de tierras baldías en la Altillanura, confrontando al gobierno de Iván Duque en su apuesta por la ‘cultura de la legalidad’.
“Una buena prueba sobre la prédica gubernamental de la ‘legalidad’ será el tratamiento de la Agencia Nacional de Tierras (ANT) en el caso del representante Gustavo Londoño”, trinó Arias.
Según una publicación del portal Liga de la Decencia (alianza de varias organizaciones, incluida la Fundación para la Libertad de Prensa –FLIP–), Londoño, representante del Centro Democrático por Vichada, habría adquirido 6.633 hectáreas en La Primavera, un municipio del departamento que representa.
El congresista opositor sostuvo que ya le había solicitado a la ANT investigar a Londoño anotando que “crece la lista de apropiación ilegal y acumulación irregular de baldíos en la Altillanura”.
“Anuncio debate de control político sobre apropiación de tierras en el Vichada”, dijo Arias en sus redes sociales, informando de la radicación de un derecho de petición a la directora de la ANT, Myriam Martínez, “para que inicie verificación inmediata de los hechos denunciados”, exigiéndole al presidente Duque que “le explique al país las actuaciones de su partido y que de ser ciertas las denuncias se proceda a la recuperación de las mismas”.
El senador Arias recordó que “en el período 2010-2014 denuncié la apropiación ilegal de baldíos por parte de transnacionales, empresarios y ministros del gobierno Santos”, y que esas denuncias fueron respaldadas “por la contralora Sandra Morelli y le costó la embajada a Carlos Urrutia”.
Al cierre de esta edición Londoño no le había respondido a Arias, pero le negó al portal que publicó la información haber obrado fuera de la ley, asegurando que en Vichada no hay baldíos. “Esos son mal llamados baldíos. Un baldío es una tierra donde no existe nada, donde no hay nadie”, dijo.
“Yo instauré esa demanda ante el juzgado porque cuando usted demuestra que ha estado trabajando la tierra durante equis años, bien habida, pasivamente, el Estado y la ley le da el derecho de que un juzgado le otorgue la pertenencia sobre esa tierra”, argumentó.