El excanciller Álvaro Leiva le cumplió la cita a la Procuraduría y rindió su versión libre con respecto al juicio disciplinario que avanza en su contra por haber declarado desierta la licitación 001 de 2023 sin tener los fundamentos fácticos, jurídicos y técnicos.
Durante la audiencia, Leyva defendió su postura y afirmó que afirmó que el Estado “no puede estar en el sindicato del pasado”, con respecto a las licitaciones publica, sostuvo su punto argumentado que debe prevalecer el derecho a la igualdad y libre competencia.
Asimismo, expuso que declaró desierta la licitación como un “acto de buena fe, pensando en los derechos fundamentales de los ciudadanos. Se aplicó el principio de interés general, de económica, de transparencia, de responsabilidad”. Adicionalmente, criticó la posible falta de diversidad y competencia en el proceso de licitación, cuestionando si realmente se ha buscado la mejor opción o simplemente se ha seguido un patrón establecido durante mucho tiempo.
“Pareciera que es la única empresa en el universo que históricamente pudiera cumplir con los requisitos de la licitación desde los 70. Eso no desdice de la empresa, desdice del Estado. La pregunta era si Thomas Greg & Sons es sinónimo de perfección absoluta”, planteó el excanciller.
Por otro lado, afirmó que en las observaciones a la licitación se estarían estableciendo condiciones que representarían copiar el mismo contrato que está actualmente en ejecución con Thomas Greg, lo que significaría generar un pliego “sastre” para las capacidades e intereses de esa empresa.
La audiencia fue suspendida y se estableció que el 11 de julio a las 9 de la mañana se llevarán a cabo los alegatos de conclusión por parte de la defensa del señalado.