La Policía Nacional desplegó en la totalidad del territorio nacional una serie de actividades operativas que en conjunto permitieron que los colombianos disfrutaran en familia la noche de Navidad.
Es necesario destacar la importancia de la incautación de 38 armas de fuego y 2.062 armas blancas dada la potencialidad criminal de estos elementos.
Vidas que se salvan…
En la “nochebuena” fueron incautadas 717 botellas de licor adulterado, cuya prueba química arrojó un elevado contenido de alcohol antiséptico en su composición, lo cual se constituye en un riesgo inminente para las personas que lo hubiesen podido ingerir (3.585 víctimas potenciales).
En el mismo sentido, fueron incautados 854 kilogramos de pólvora en establecimientos comerciales de barrio, sobre los cuales se iniciarán las acciones legales para las respectivas sanciones, las cuales pueden llegar hasta el cierre de los mismos.
No obstante, las cifras de quemados reportados directamente a la Policía Nacional da cuenta de 12 personas lesionadas, de los cuales 8 son menores de edad, sin embargo, la institución realizará una verificación con hospitales y puestos de salud para conocer de manera concreta el número de afectados, toda vez que algunos casos no son reportados por las implicaciones legales que tienen estos irresponsables comportamientos.
Cabe resaltar que los padres de familia que han permitido que sus hijos manipulen pólvora y hayan resultado quemados, podrán ser sancionados como lo establece el decreto 4481 de 2006, que a la letra dice “…A los representantes legales del menor afectado por quemaduras ocasionadas por el uso de artículos pirotécnicos, a quienes se les encontrase responsables por acción o por omisión de la conducta de aquel, se les aplicará una sanción pecuniaria hasta por cinco (5) salarios mínimos legales mensuales vigentes…”
Hubo un buen comportamiento en la noche de navidad…
A pesar que se presentaron 4.567 riñas en todo el país, es destacable que esta índice haya disminuido en un 22 % en comparación con la noche de navidad del año 2011, lo cual se vio representado en una reducción en las lesiones personales del 79 % (41 heridos), esto significa que gracias al control de las armas blancas y de fuego, en teoría se evitó que 154 colombianos pasaran la Nochebuena en un hospital.
Finalmente, es necesario resaltar que de mantenerse la tendencia en materia de seguridad potenciada por el Plan Cuadrantes, la temporada de Navidad y Fin de Año pasará a la historia como una de las más seguras de los últimos años, hasta la fecha, durante la época decembrina se han reducido los hurtos a residencia en un -28%, los robos a personas en un – 24 % y el hurto a comercio logró una reducción del – 25 %.
El gran reto como sociedad es continuar forjando comportamientos tolerantes para disfrutar de la jornada del Año Nuevo en paz. Colombia ha demostrado tantas veces que somos capaces de hacerlo.