Tras el hundimiento del proyecto de ley que castigaba con pena privativa de la libertad a los conductores ebrios y a los que estando bebidos causaran víctimas fatales, el senador liberal Luis Velasco presentó nuevas alternativas legales para evitar estos casos que registran altos índices de mortalidad en el país.
El presidente de la Comisión Primera del Senado manifestó que impulsará a través de la reforma de la justicia un plan B. Se trata de darle facultades a la Policía para conducir hasta por 36 horas a centros especiales a las personas que se conviertan en un riesgo para sí mismos o para terceros cuando estén bajo el efecto de sustancias alcohólicas o alucinógenos.
El senador Velasco aseguró que el tema será incluido en el Código de Policía, a través de una ley reglamentaria que se presentará después de aprobada la reforma judicial. "La medida se aplicará a todo el mundo, incluidos magistrados y congresistas, y no genera un antecedente judicial. Un conductor ebrio debe ir a pasar la borrachera y el guayabo en un calabozo de una estación de Policía", explicó Velasco.
El senador del Polo Democrático Alternativo Parmenio Cuellar dijo que su colega de Comisión no sabe ni que es lo que esta proponiendo un día dice una cosa y otro día otra cosa.
“Él no sabe. Él no tiene claridad de lo que está proponiendo. Mi oposición consiste en que no se debe privar de la libertad a una persona sin orden de un juez”, dijo.
Para el congresista, un inspector de transito no puede dar la orden de detener a un conductor ebrio.
“No saben cómo reformar esa norma que no le permite a las autoridades de policía privar de la libertad o capturar. Lo que puede es conducirlo a su hogar”, explicó Cuellar.