Mientras la veedora distrital Adriana Córdoba previno sobre que a corte de enero se había ejecutado apenas el 14 por ciento del presupuesto, el secretario Distrital de Hacienda, Ricardo Bonilla, desmintió al señalar que asciende al 18 por ciento.

Para Córdoba, es preocupante que en periodo en el que tradicionalmente se da celeridad a la ejecución presupuestal por la entrada en vigencia de la Ley de Garantías, se tiene en cuenta que en el mismo periodo de años electorales como 2006 y 2010 la ejecución alcanzó el 18 por ciento y 35 por ciento, respectivamente.

“Al inicio del tercer año de gobierno del alcalde Gustavo Petro persiste la baja ejecución. Es necesario que la Administración Distrital le dé celeridad en los próximos meses buscando respetar el principio de anualidad que indica que los recursos se deben ejecutar en la vigencia fiscal comprendida entre el primero de enero y el 31 de diciembre de cada año”, explicó la veedora.

Es oportuno recordar que el Distrito cerró el año 2013 con el 87 por ciento de ejecución de los 10,3 billones de pesos disponibles, quedando con 3 billones de pesos en reservas presupuestales y obligaciones por pagar en 2014, adicionales al presupuesto que fue aprobado por valor de 14,6 billones de pesos.

El informe de la Veeduría Distrital agrega que al inicio de la actual Administración, el Distrito ejecutó el 16 por ciento en el primer mes; en el segundo año descendió al 11 por ciento y ahora, en 2014, subió ligeramente al 14 por ciento. En el mismo periodo del año 2010 (año electoral) fue del 35 por ciento y en 2011 del 22 por ciento.

En este seguimiento a la inversión directa de las entidades de la Administración central, establecimientos públicos, empresas industriales y comerciales, alcaldías locales, Contraloría de Bogotá y Universidad Distrital, el ente de control preventivo explicó que en giros, es decir, en dinero realmente desembolsado, el Distrito registró el 1 por ciento, lo que significa que pagó 131.000 millones de pesos de los 11,9 billones disponibles.

De acuerdo con el informe, las empresas industriales y comerciales (Acueducto, Transmilenio, Empresa de Renovación Urbana, Canal Capital, Lotería de Bogotá y Metrovivienda) tuvieron el mayor porcentaje de compromisos en el primer mes de 2014, con el 38 por ciento, mientras que en giros fue del 2 por ciento.

En segundo lugar se ubicaron las entidades de la Administración central (13 secretarías, excepto Salud, cuyos recursos se ejecutan a través del Fondo Financiero de Salud, Veeduría Distrital, Personería,  Departamento de Servicio Civil, Cuerpo Oficial de Bomberos y Defensoría del Espacio Público) que registraron una ejecución de compromisos del 15 por ciento y giros del 2 por ciento.

Más ejecución

Frente al estudio de la Veeduría, el secretario de Hacienda, explicó que a corte 20 de febrero, se han ejecutado alrededor de 2 billones de pesos. “Las tres entidades que registran mayor ejecución hasta ese corte son la Secretaría de Gobierno, con una ejecución del 62,2 por ciento; el Departamento Administrativo de la Defensoría del Espacio Público, con el 42,1 por ciento; y la Secretaría de Integración Social, con el 37,9 por ciento. Le siguen: la Fundación Gilberto Alzate Avendaño, con el 46,6 por ciento; la Orquesta Filarmónica de Bogotá, con el 41,9; el IDEP, con el 31,4 por ciento; el Instituto Distrital de Turismo, con el 25,5 por ciento; el Instituto Distrital de la Artes; con el 28,2 por ciento; la Secretaría de Medio Ambiente, con el 19 por ciento; el IDRD, con el 16,8 por ciento; y el Idipron, con el 15,1 por ciento”.

Según el monto de recursos, dijo Bonilla, los mayores volúmenes de inversión ejecutados a febrero 20 fueron realizados por: Secretaría de Educación, con 363.792 millones de pesos; Secretaría de Integración Social, con 301.397 millones de pesos; Fondo Financiero de Salud, con 144.270 millones de pesos; la Secretaría de Gobierno, con 36.131 millones de pesos; el IDRD, con 35.360 millones de pesos; y la Unidad de Malla vial, con 35.232 millones de pesos.

Finalmente, la Secretaría de Hacienda aclaró que la contratación en el sector Salud no se ve afectada por la ley de garantías, por lo cual, no tenía la urgencia de ejecutar mayor cantidad de recursos con relación a años pasados.