A tan solo tres días para votar en el Concejo el Plan de Desarrollo, mientras se espera el documento del alcalde Mayor Gustavo Petro sobre las modificaciones propuestas por los partidos políticos, sigue el debate sobre cómo se financiarán los 61 billones que se invertirán en los próximos cuatro años.

El secretario de Hacienda, Ricardo Bonilla González, enfatizó que el interés de la Administración Distrital es que sea aprobado en el Concejo Distrital y no salga por decreto. “Las fuentes de financiamiento son cuatro: ingresos corrientes (impuestos y recursos no tributarios), transferencias de la Nación, recursos procedentes del crédito (cupo de endeudamiento) y alianzas público-privadas”.

El funcionario puntualizó que “el Plan no está desfinanciado pues de su total, el 75% está garantizado y sólo el 25% corresponde a recursos que debemos gestionar. El mayor impacto se presenta en los sectores de Hábitat y Movilidad. El primero creció el 264%, porque se dio mucha importancia a la vivienda de interés prioritario, y el segundo, el 81,7%, porque garantiza obras de infraestructura fundamentales para la ciudad.

El funcionario reiteró que el alcalde Mayor, Gustavo Petro, “no se echó para atrás” en darle importancia al componente social del PDD, pues éste contará con el 75% de los recursos. No se descuidarán los proyectos de inversión en primera infancia, jornada escolar única y de salud. El 25% restante es para la movilidad, pues “este Gobierno debe trazar los lineamientos del metro pesado, queremos un metro ligero y ampliación de Transmilenio”, añadió.

Frente a la necesidad de gestionar un cupo de endeudamiento, Bonilla afirmó que Bogotá no a va a quedar sobre endeudada, pues la ciudad en este momento tiene un rubro de endeudamiento de $1,6 billones, que representa apenas el 1,1 por ciento del PIB. “Si se lleva el cupo al extremo, en 2016 será de 2,4 por ciento. Si lo comparamos con el país, la deuda corresponde al 43% del PIB de la Nación”, dijo el titular de las finanzas públicas.

Defectos

Entre tanto, la Contraloría de Bogotá evaluó el Plan de Desarrollo, donde observó falencias respecto de la inclusión de programas, proyectos y metas, sobre temáticas planteadas en la propuesta del programa de gobierno “Bogotá Humana ya”, 2012-2015:

En Educación se cambia la propuesta programática en la que se implementaría la jornada única educativa  por una jornada extendida que no cumple con las expectativas planteadas en la mencionada propuesta.

Movilidad, el numeral 3.4 plantea que el gobierno de Bogotá Humana promoverá la terminación de la red de Transmilenio según el plan original; sin intervenir los carriles de tránsito mixto. En este propósito el diseño y contratación se limitaría exclusivamente a los carriles centrales en las troncales de la carrera 7a  entre otras; pero al analizar el proyecto de Plan de Desarrollo  en el artículo 61, “Proyectos de infraestructura de transporte”, para el mencionado tramo se plantea la construcción de metro ligero, lo que evidencia un cambio a la propuesta inicial.

Ambiente, la propuesta programática propuso terminar con el modelo de ciudad depredador del medioambiente. Al identificar la propuesta en el proyecto de Plan de Desarrollo se observa que a pesar de denominar uno de  los ejes estratégicos como “Un territorio que enfrenta el cambio climático y se ordena alrededor del agua”, se omite implementar una estrategia que contrarreste la contaminación producida por las fuentes fijas como  las industrias, y no se da continuidad al “Programa de saneamiento del río Bogotá” ni al  manejo de arbolado urbano y recuperación del espacio público en zonas verdes.

Otro de los temas que más preocupan al organismo de control es el financiamiento. “No define con exactitud qué proyectos serían financiados con los 3,5 billones de pesos y no especifica en el Plan el costo de cada proyecto. Esto evidencia incertidumbre en la utilización de los recursos y en el costo de los mismos, cuando expresa que los desembolsos dependerán de las necesidades de caja y los flujos de pagos de los proyectos".