Mientras la protesta social se haga sin vulnerar los derechos de la gran mayoría de los ciudadanos, el Gobierno nacional la promoverá y la Fuerza Pública la debe proteger, pues  hace parte de la Constitución Nacional.

Así lo reiteró este lunes Juan Carlos Pinzón, ministro de Defensa Nacional, al ser consultado sobre las recientes declaraciones del grupo terrorista Farc acerca de que las medidas y proyectos presentados para proteger la población civil y contra la criminalidad pretenden criminalizar la protesta social y violan los derechos fundamentales.

“Causa gracia oír a un grupo terrorista que ha violando todo el Código Penal, que fundamenta su existencia en la violación de todas las normas que hay a nivel nacional e internacional, hablando de respeto por los derechos. Causa gracia, es lo que uno puede pensar”, aseguró el ministro Pinzón en Cartagena, donde instaló la séptima edición del taller Senior Workshop on International Rules Governing Military Operationes (Swirmo), al que asisten más de 60 altos oficiales de las fuerzas militares y policiales del mundo.

El alto funcionario insistió en que el Gobierno nacional nunca estará en contra de la protesta y que lo que le corresponde en garantizar los derechos de la gran mayoría de ciudadanos.

“Cuando en esas protestas hay violencia contra otros ciudadanos o cuando hay  afectación de los derechos a la movilización, alimentación, trabajo y la salud, la Fuerza Pública tiene el deber de actuar, no para atacar esa protesta sino para proteger los derechos de los ciudadanos”, explicó.

De otra parte, el ministro Pinzón señaló que un avión estadounidense que cayó en medio de una operación de interdicción en el Caribe no fue derribado por grupo armado alguno. “Se trató de un accidente”, enfatizó.

Manifestó que en medio de los acuerdos con gobiernos de otros países en la lucha contra el narcotráfico y otros crímenes transnacionales se detectó una lancha go fast, por lo que se desplegó una operación coordinada con un avión estadounidense que tiene como base Panamá y unidades de la Armada Nacional. En la persecución, la aeronave se accidentó.

“No hubo derribo alguno –aseveró–. Ya es hora de que le exijamos seriedad a esta gente porque aquí hay que decir la verdad. El pueblo colombiano no resiste mentiras ni que las cosas se manejen como si fuera un espectáculo; seriedad por amor y bien del pueblo colombiano”.