Mientras las autoridades tratan de judicializar algunas organizaciones de pimpineros que, al parecer, tienen vínculos con las bandas criminales al servicio del narcotráfico (Bacrim), la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) y los departamentos de Policía Norte de Santander, Guajira y Cesar, continúan fortaleciendo las medidas de seguridad en un esfuerzo para neutralizar el contrabando de gasolina y de aceite combustible para motores (ACPM) en la frontera viva con la República Bolivariana de Venezuela.
Las cifras oficiales conocidas por EL NUEVO SIGLO dan cuenta de que desde el 1 de enero a la fecha, han sido capturadas 164 personas sindicadas de tráfico de hidrocarburos de contrabando, al tiempo que se logró el decomiso de 83.400 galones de gasolina y 144.845 de ACPM.
En el mismo lapso, las fuerzas del orden neutralizaron 30 laboratorios para el procesamiento de alcaloides que, al parecer, recibían combustibles de contrabando, al tiempo que fueron inmovilizados 89 vehículos utilizados para el transporte de los hidrocarburos adquiridos en Venezuela.
Subempleo
Actualmente los organismos secretos afirman que unas 3.500 personas arriesgando sus propias vidas participan del difícil oficio de traficar con gasolina de contrabando, una actividad ilegal pero corriente que se registra todos los días en la frontera viva con Venezuela.
Las estaciones de servicio de expendio de combustibles ven con preocupación que sus operaciones se reducen por el contrabando que llega a lo largo de la frontera a los departamentos de Norte de Santander, el Cesar, La Guajira, Arauca y Vichada.
Luis Rodríguez, un pimpinero de Cúcuta, afirmó que su arriesgado oficio lo hace desde hace más de 40 años “porque en Norte de Santander no hay oportunidades de empleo y los pocos que hay los patronos no pagan bien o se limitan al salario mínimo que no alcanza para casi nada”.
“Cómo será”, explicó Rodríguez, “que en Cúcuta las autoridades exigen a los pimpineros implementar medidas de seguridad como la no aglomeración de vendedores, la exigencia de un extinguidor, de una caneca con agua, de un par de bultos de arena y, además, de un aviso grande que prohíba fumar y de otro que recomiende apagar el motor mientras el carro se provee de la gasolina de contrabando en plena vía pública y en medio de uno de sus recorridos por la capital de Norte de Santander”.
Rodríguez sostuvo que se trata de exigencias mínimas a pesar de los enormes riesgos que implica manipular gasolina y ACPM de manera artesanal, pues se trata de combustibles altamente inflamables y que pueden causar graves heridas o incluso la muerte en caso de un accidente.
“No nos digamos mentiras: nosotros los pobres tenemos que vivir y llevar el sustento diario a nuestros hogares, alimentar a nuestros hijos. Y si no hay trabajo, entonces tenemos que estar en el mercado, en nuestro caso, con la gasolina y el ACPM. Aunque es un negocio muy arriesgado, nos permite ganar unos pesos y estar al día en el hogar”, precisó Rodríguez.
El pimpinero aseguró que “los combustibles se compran muy baratos en Venezuela, lo que los hace muy competitivos en Colombia y por esta razón nos ganamos unos pesitos para sobrevivir, para sobrevivir con nuestras ventas a buses, taxis, camionetas y motocicletas e incluso en algunos casos a vehículos oficiales y ante los ojos de la Policía”.
Coomulpinort
“En las pequeñas poblaciones ubicadas en la zona de frontera, pero en territorio colombiano, los combustibles se venden en las calles o en viviendas que son habitadas por familias con niños que conviven las 24 horas con el riesgo de un incendio o de una explosión”, contó.
También los depósitos artesanales de estos combustibles afectan a los moradores de las viviendas porque inhalan permanentemente los gases.
“El problema no es solo de seguridad sino además la salubridad”, afirmó el comandante de la Policía en Norte de Santander, coronel Eliécer Camacho.
En el 2011 la Alcaldía de Cúcuta llegó a un acuerdo con la Coomulpinort que agrupa a los pimpineros para prohibir la venta de estos combustibles de contrabando el último jueves de cada mes.
La medida fue suscrita entre la Administración Municipal y Nelly Mora, presidenta de la Coomulpinort.
También las autoridades venezolanas adelantan controles para tratar de minimizar el contrabando de combustibles a Colombia.
Las autoridades del vecino país aseguran que a pesar de las medidas de control, pasando los puentes internacionales de San Antonio del Táchira y Pedro María Ureña se puede observar a los pimpineros colombianos con sus puntos ambulantes de venta sin ningún tipo de protección y de prevención de accidentes.
Muchos hombres, mujeres y jóvenes integran la Cooperativa Múltiple de Pimpineros de Norte de Santander (Coomulpinort) en la zona de frontera. Pero la actividad de los pimpineros se registra especialmente en La Parada, Villa del Rosario, Cúcuta, Ocaña, Pamplona, Tibú y El Zulia, entre otras poblaciones.
Los pimpineros también están en La Guajira, el Cesar, Arauca y Vichada.
Las autoridades y organismos secretos revelan que el combustible es transportado en los tanques de taxis y camiones o hasta en bicicletas, tanto a través del puente internacional Simón Bolívar, como a través de caminos verdes o las llamadas trochas.
Las Cifras
El coronel Camacho reveló que desde el primero de enero han sido capturadas 45 personas que están dedicadas exclusivamente al transporte de gasolina y ACPM de contrabando desde Venezuela hacia Colombia.
“También tenemos más de 62.000 galones de combustibles decomisados, 40.000 de ACPM y 22.000 de gasolina”, precisó el oficial.
Sin embargo, explicó, “una vez son capturados los contrabandistas, las autoridades competentes los dejan en libertad porque esa infracción a las normas de Ley es excarcelable”.
De acuerdo con Camacho, la Policía Nacional cuenta con rigurosos controles por parte de la Dirección de Tránsito y Transportes, la Polfa, que controla las vías que van a Pamplona y a Ocaña, y además se trabaja en coordinación con la Fiscalía General de la Nación.
“La economía nacional sufre millonarias pérdidas con el contrabando de gasolina y de ACPM, pues los pimpineros no declaran”, afirmó.
El coronel Camacho señaló que esta actividad ilegal es ejecutada por familias enteras que, en la mayoría de los casos, no cuentan con empleos formales.
“Estamos trabajando en forma coordinada con el ente acusador, pues hemos detectado que algunas de estas organizaciones traen gasolina para las bandas emergentes al servicio del narcotráfico que surten sus laboratorios para el procesamiento de base de coca y de clorhidrato de cocaína”, precisó.
“Pienso que no se trata de verdaderas mafias sino de pequeñas organizaciones que traen la gasolina y el ACPM del vecino país para vender en las calles, pero otras cantidades importantes van directamente a los laboratorios clandestinos para el procesamiento de alcaloides”, señaló.
El coronel Camacho indicó que “estamos al frente de estas investigaciones y hemos obtenido resultados sobre la gasolina que se desvía a esos centros de producción de alcaloides. Y se sabe que por el río Catatumbo, por el sector de La Gabarra llega mucho de este combustible de contrabando”.
También hay otros desvíos de combustibles que incluso llegan con planillas legales a los municipios de Hacarí, San Calixto, Convención y Teorama, entre otros.
El jefe de la Policía en Norte de Santander aseguró que gracias al trabajo de la institución armada y de la Polfa 146 personas han sido aprehendidas por cargos de contrabando de combustibles en los últimos 15 meses.
El coronel Camacho afirmó que también en los últimos 15 meses han sido desmantelados 137 laboratorios para el procesamiento de base de coca y clorhidrato de cocaína por parte de la Policía Antinarcóticos.
El oficial anotó que “algunos de estos centros de producción de alcaloides se surtían con gasolina venezolana que ingresa de contrabando a Colombia por el accionar de los pimpineros y algunas organizaciones que traen directamente del vecino país los combustibles”.
El oficial reveló que también en los últimos 15 meses han sido decomisados 161 mil galones de combustibles, 70.000 de gasolina y 91.000 de ACPM.
“Aquí lo importante es establecer los nexos de algunas de esas organizaciones de contrabandistas de gasolina y ACPM con las redes de narcotraficantes y en ello estamos trabajando sin descanso”, afirmó, agregando que “trabajamos para que estas personas con esos vínculos puedan ser judicializadas por cargos de concierto para delinquir y tráfico de combustibles”.
Sin embargo, aclaró que no todos los pimpineros pueden ser señalados de estas actividades con el narcotráfico, porque muchos de ellos trabajan vendiendo los combustibles en las calles de Cúcuta y otros municipios para subsistir y porque no tienen otro ingreso o trabajo formal.
El coronel Camacho aseguró que se trabaja en coordinación con el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), de la Fiscalía, para judicializar el tráfico de los combustibles y vigilar estrictamente a las estaciones de servicio para evitar que esos productos sean desviados”.
Cesar
Mientras tanto, el comandante operativo de la Policía en el Cesar, coronel Javier Alexánder Parra, reveló que en el departamento se trabaja en coordinación con los organismos de inteligencia y la Fiscalía para enfrentar el contrabando de hidrocarburos que deja en lo corrido del presente año la captura de 119 personas.
El coronel Parra explicó que desde el primero de enero a la fecha han sido decomisados 68.283 galones de ACPM y 35.186 de gasolina.
El oficial precisó que en el mismo lapso en desarrollo de los operativos para enfrentar este flagelo han sido inmovilizados 89 vehículos, entre camionetas, automóviles y camiones, empleados para el transporte de los combustibles y las conocidas pimpinas con el ACPM y la gasolina de contrabando.
El comandante operativo de la Policía en el Cesar aseguró que los 119 capturados quedaron a disposición de jueces con funciones de control de garantías y de la Fiscalía para el desarrollo de las correspondientes investigaciones por cargos de tráfico de gasolina y ACPM de contrabando por las graves consecuencias para la economía nacional.
El oficial señaló que “estamos trabajando en coordinación con el ente acusador y las diferentes autoridades municipales y departamentales en un esfuerzo para poder contrarrestar y minimizar esa conducta”.
De otra parte, el coronel Parra explicó que los servicios de inteligencia tienen información que algunos combustibles de contrabando son transportados hacia el sur de Bolívar para surtir los laboratorios para el procesamiento de alcaloides y otras actividades criminales.
“Estamos trabajando en ese frente y buscamos fortalecer los controles y la lucha contra este flagelo que afecta la economía no solo departamental sino nacional”, agregó el coronel Parra.
Por su parte, la Polfa reveló que desde el primero de enero de 2012 han sido decomisados 76.348 galones de ACPM y 71.663 galones de gasolina.
De acuerdo con la Polfa el valor de los combustibles decomisados en el lapso en mención superan los 684.933.984 pesos.
Los operativos de decomiso del ACPM y de la gasolina los ejecutó la Polfa en Arauca, Cúcuta, Ipiales y Riohacha.