Piedra en el zapato | El Nuevo Siglo
Domingo, 23 de Octubre de 2011


El nudo gordiano que pretende desatar el presidente Santos promoviendo la elección de su vicepresidente Angelino Garzón como director general de la OIT, con asiento en Ginebra, Suiza, es prueba fehaciente del deseo que tiene el inquilino de la  Casa de Nariño de permanecer por cuatro años más en el primer empleo de la Nación.
 
La sucesión
El ofrecerle la posibilidad de acceder al cargo más importante en el sindicalismo universal a su eventual competidor  para el período presidencial 2014-2018 demuestra el temor que le inspira a Santos la candidatura del segundo de a bordo.
El cargo con el que se tienta a Garzón tiene todos los elementos para mantenerlo distante del escenario nacional, bien atareado, lejos de micrófonos, cámaras y reflectores, además de la atractiva asignación de veinticinco mil dólares mensuales durante los ocho años que dura el período.
 
¿Sueño aplazado?
En caso de que acepte la nominación y se dé su elección, Angelino aplazaría su sueño de verse convertido, desde las alturas del poder,  en émulo de dos grandes sindicalistas de fama mundial: el polaco Lech Walesa y el brasileño Lula Da Silva, quienes llegaron a dirigir los gobiernos de sus respectivos países.
 
Parapeto
Garzón ha montado su campaña sobre banderas populares que seducen a la galería como la revisión del salario mínimo; críticas a los tecnócratas oficiales que aseguran que una familia pobre puede alimentarse con 190 mil pesos; el paro de camioneros; el pulso con el sindicalismo petrolero en Pacific-Rubiales y sus posturas contrarias  al neoliberalismo del ministro de Hacienda.
 
Retaliación
Cuando el presidente del Consejo de Estado, Mauricio Fajardo, propuso la eliminación del Consejo Nacional Electoral en la reforma judicial, le  pasó cuenta de cobro al Congreso. Recordemos que cuando el órgano legislativo  le quitó a la Sección Quinta todas las facultades electorales y se las trasladó directamente al Consejo Electoral, apéndice de ellos mismos, pues son quienes  los escogen para que, a manera de una especie de puerta giratoria, los nueve integrantes de esa la rama los vigilen electoral y políticamente.
La anulación de la elección del Consejo Electoral a partir del 15 de diciembre no es más que un saludo a la bandera, pues los mismos congresistas repondrán sus  fichas y jugarán en el carrusel de la felicidad por otros cuatro años.
 
Concejales
El próximo domingo, 17 de los 43 concejales de Bogotá llegarán a los comicios en desigualdad de condiciones, puesto que la Fiscalía les puso una espada de Damocles en el momento más crucial de la campaña, en la que las sedes de los afectados parecen unas salas de velación. Se teme que haya entierros de tercera, en vez de primera.
 
Emplazamiento

El sábado, Gina Parody emplazó a Enrique Peñalosa a que “purgue” las listas de candidatos al Concejo porque nueve de los 17 implicados por la Fiscal pertenecen a su movimiento. Por su parte, Antanas Mockus celebró la tarea purificadora que adelanta la institución al mando de Vivian Morales.