Con la papa caliente de 6.880 integrantes de barras bravas en las localidades de Kennedy, San Cristóbal y Engativá, se sigue adelantando un amplio debate, tanto en Bogotá, como en todo el país sobre la violencia que han generado estos grupos.
En la Comisión Séptima del Senado coincidieron en que se deben tomar medidas radicales para frenar el problema de la violencia alrededor de los equipos de fútbol.
Sin embargo, la Administración distrital propuso a los hinchas de Millonarios y del Atlético Nacional que asistan al estadio el martes próximo portando una camiseta blanca.
“Estamos pensando con el señor Alcalde si podemos llegar a un acuerdo para que el martes vayan todos con camisa blanca al estadio. Creo que es importante que podamos manifestarle a Colombia una actitud muy diferente a la que hemos tenido hasta ahora y lograr darnos la mano entre todos”, manifestó el secretario de Gobierno, Guillermo Alfonso Jaramillo.
Durante el debate, se escucharon argumentos y propuestas para combatir la violencia que se ha tomado el fútbol en los últimos días y que causó la muerte de un hincha el lunes de la semana pasada.
El alcalde Gustavo Petro recordó que “durante los 86 partidos celebrados en el estadio El Campín en lo que va del 2013, no hay un muerto en el entorno del estadio ni adentro de éste. Se detectaron cuatro riñas en el estadio y tres afuera de él”. Agregó que se registraron cero lesionados por arma blanca en el escenario deportivo y tres afuera.
Con estas estadísticas Petro recalcó que el problema de violencia no está en el estadio, “la muerte está afuera, la tasa de homicidios es decreciente en Bogotá, la ciudad ha podido disminuir los índices de violencia. El problema es que el 53% de las personas que mueren son jóvenes. Lo que se presenta es el ascenso de la violencia que tiene como actor al joven del barrio popular allí no había camisetas de fútbol”.
Petro manifestó que la mayoría de los jóvenes no han ido al estadio porque la boleta es cara comparando sus ingresos, y que los muchachos se vuelven hinchas por hacer parte de un colectivo pero no asisten a fútbol ni lo ven por televisión.
El ministro del Interior, Aurelio Iragorri, señaló que “no podemos llorar y celebrar goles al mismo tiempo. Por eso aplaudimos la medida tomada por la Administración distrital”.
Iragorri propuso, como Gobierno nacional, un programa conjunto en todos los municipios e hizo un llamado a todos los medios de comunicación para que apoyen la iniciativa.
En las 19 localidades de Bogotá se encuentran barras de muchos equipos del fútbol colombiano, principalmente se destacan las de Santa Fe, Millonarios, Nacional y América.
Según el Centro de Estudio y Análisis en Convivencia y Seguridad Ciudadana de la Secretaría de Gobierno de Bogotá, en la ciudad hay más de dos millones divididos principalmente en tres localidades: San Cristóbal (1.440), Engativá (1.510) y Kennedy (2.820).
Así mismo, los principales grupos de barristas presentes en Bogotá son La Guardia Albi-Roja Sur (Santa Fe); Comandos Azules, Blue Rain (Millonarios); Los del Sur, Nación Verdolaga y Pasión Verdolaga (Nacional); y Disturbio Rojo (América).
Los barristas normalmente suelen ocupar espacios comunes como parques, canchas de fútbol y baloncesto, alrededores del estadio y entornos institucionales como colegios, razón por la cual en ocasiones se generan riñas por hacer delimitaciones territoriales.