De no planearse un ordenamiento territorial en forma más rigurosa y técnica es muy posible que el conflicto por la tierra superviva e incluso se agudice en un escenario de postconflicto con graves consecuencias para el mediano y el largo plazo, señaló el director del Instituto Geográfico Agustín Codazzi, Juan Antonio Nieto Escalante.
“El desarrollo regional no será efectivo sin un adecuado orden en el uso del territorio. Basta recordar el desperdicio de la tierra cuando no se usa para aquello para lo cual tiene una evidente vocación”, expresó.
Añadió que el Instituto Agustín Codazzi desea participar en este proceso “a través de los procesos de acompañamiento y como facilitador de la aplicación de metodologías de ordenamiento y planificación del territorio, en las temáticas relacionadas con el catastro, la agrología, la geografía y la cartografía, y a su vez, mediante la integración de las diferentes estructuras del conocimiento, los sistemas de información geográfica y otros insumos”.
El funcionario advirtió que es evidente que la paz conducirá a moderar la fuerte migración campo–ciudad, a clarificar las zonas productivas, a activar la economía, a crear un clima de convivencia ciudadana y al interior de las familias, y a que los colombianos tengamos una visión más optimista sobre el futuro del país. “Las graves consecuencias que causa el conflicto interno -en todas las dimensiones de la vida social- justifica la posición indeclinable del Presidente Santos de lograr un acuerdo de paz”, dijo.
El mejor país que se construiría a partir de la consecución de la paz “es de por sí suficiente argumento para hacer los mayores esfuerzos en las conversaciones de La Habana, a pesar de los críticos, que están en todo su derecho de disentir”, anotó Nieto Escalante.