La Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía General de la Nación pidió la máxima condena para Mario Armando Majé Peña y Eduardo Castro Álvarez como presuntos responsables del homicidio de una enfermera y otra persona en Ocaña (Norte de Santander).
La petición fue hecha al juzgado décimo penal del circuito de Bogotá por hechos en los cuales los dos acusados habrían asesinado a la enfermera Victoria Elena Jaime Bacca y Jafride Carrillo Sarabia en hechos ocurridos en agosto de 2003 en la población de Pueblo Nuevo en Ocaña (Norte de Santander) a manos de integrantes del frente paramilitar Héctor Julio Peinado Becerra.
La petición fue hecha por la Fiscalía al juzgado décimo penal del circuito de Bogotá. Allí, el representante del ente acusador dijo que un testigo, que compartió el lugar de cautiverio con ellas y alcanzó a huir, vio y escuchó a las víctimas cuando eran ultrajadas por los integrantes del grupo armado ilegal. “Ellas lloraban y suplicaban por su vida”, sostuvo el testigo.
El ente acusador los acusó de los delitos de concierto para delinquir en circunstancias de agravación en concurso material homogéneo y heterogéneo con secuestro agravado en concurso con homicidio agravado en persona protegida.
De acuerdo con las investigaciones, Majé Peña era el coordinador de los ilícitos con las autodefensas mientras que Castro Álvarez era quien conducía a las víctimas al lugar del secuestro por tratarse de supuestas auxiliadoras de la guerrilla.
Por su parte la Procuraduría envió copias a la Fiscalía para que investigue a varios testigos que durante el trámite del proceso judicial se contradijeron para favorecer a los profesados.