A través del proyecto 119 de 2015 de autoría del concejal Javier Palacio Mejía, el Concejo de Bogotá, propone la creación de un grupo especial integrado, por personal de la policía y funcionarios de Transmilenio para detectar en todas las troncales, los más de 60 mil colados diarios que tiene el sistema.
EL proyecto propone que dichos infractores de las normas de convivencia contempladas por el código de policía sean sancionados con un determinado número de horas de trabajo comunitario, en parques, estaciones del sistema, escuelas, jardines, rondas de ríos y humedales.
Adicionalmente estas personas deberán asistir a charlas de cultura ciudadana para que se concienticen que su reprochable actitud pone en riesgo su vida y la de lo demás usuarios del sistema. Hay que dejar claro que colarse en Transmilenio es una contravención y no un delito por eso no puede haber cárcel para los colados.