PIB en marzo sería de 3% por paros y festivos | El Nuevo Siglo
Miércoles, 5 de Junio de 2013

Las primeras previsiones de los mercados acerca del crecimiento del Producto Interno Bruto, PIB, para el primer trimestre de este año señalan que la economía pudo llegar a una cifra cercana al 3 por ciento, presionada sobre todo por la falta de actividad.

Para el analista del Credicorp Capital, Daniel E. Velandia, “a partir de abril los indicadores empezarán a mejorar y lo harán con mayor fuerza después de mitad de año, por lo que proyectamos que al finalizar 2013 la economía nacional crecerá 4,7%”.

Indica el experto que “las tasas moderadas del primer trimestre estuvieron impactadas y contaminadas por los paros que se registraron en febrero en cuatro sectores económicos importantes, entre ellos, café y carbón. A esto se le suma que marzo tuvo una semana menos en días hábiles y laborales por Semana Santa. Esto, sin duda, también incidirá en los resultados de los tres primeros meses del año”.

Para el periodo enero-marzo se esperan tasas de crecimiento muy similares a las de los últimos tres meses de 2012. No obstante, la expectativa es que a partir del segundo trimestre las condiciones mejoren sustentadas, por un lado, en la política del Banco de la República de bajar las tasas a los niveles actuales de 3,25 y, por otro, con los recursos que ha comprometido el Gobierno dentro del ‘Plan de choque’.

“En Credicorp Capital vemos que en el segundo trimestre empezará a evidenciarse una recuperación de la actividad económica, pero esta se dará con mayor fuerza en el tercero. La proyección de crecimiento de 4,7% para 2013, en buena parte, está soportada en el Plan de Impulso a la Productividad y el Empleo (PIPE), presentado y puesto en marcha por el Gobierno Nacional”, sostiene.

Asegura, sin embargo, que uno de los principales riesgos sigue siendo el contexto externo y en particular Venezuela en donde se podría presentar una afectación importante del comercio internacional no solo por su nuevo presidente, sino por la fuerte devaluación del bolívar, lo que tendrá un impacto importante en el volumen de exportaciones.

En medio de las dificultades, la actividad petrolera creció 8% en el primer trimestre gracias a que se están resolviendo gradualmente temas de licencias ambientales y ha habido una disminución importante en el número de atentados a la infraestructura, por lo que es factible que el crecimiento del sector en el año promedie entre 7 y 8 por ciento "con sesgo al alza" y la producción se mantenga por encima del millón de barriles diarios.

“Para lo que resta del año, en infraestructura se esperan ejecuciones y desembolsos importantes, además de los incentivos promovidos por el Gobierno y los bancos para la compra de vivienda lo que llevará a una reactivación del sector de la construcción, uno de los mayores generadores de empleo. Con el PIPE proyectamos que la construcción registre un alza de entre 7 y 8 por ciento”, explica Velandia.

Indica que “con respecto al tema de la vivienda, debemos decir que en el país no hay burbuja inmobiliaria. Si bien los colombianos están destinando recursos a la compra de vivienda, no están endeudados. Mientras la gente no tenga deuda, no hay riesgos importantes sobre la economía”.

Señala que buena parte de las compras realizadas en los últimos años se han efectuado con ahorros, lo que implica que en el evento de un desempeño desfavorable de la economía, los precios no deben reducirse necesariamente como respuesta a la necesidad de vender el inmueble para pagar una deuda. Obviamente, hay que cuidar y monitorear que los bancos no relajen sus políticas de préstamo para evitar entregarles recursos a personas que no tengan las condiciones económicas para responder.