Petrobras, quinta petrolera mundial, anunció pérdidas netas en el segundo trimestre, a raíz de factores como la desvalorización del real y el desfasaje de los precios nacionales del diésel y la gasolina.
Las pérdidas netas, que fueron una sorpresa para los analistas, fueron de 1.346 millones de reales (USD 663 millones al cambio actual), contra ganancias netas de 10.943 millones de reales en el mismo periodo de 2011, informó la empresa.
"Petrobras presentó pérdidas en el trimestre", dijo la presidenta de Petrobras, Graça Foster, en una declaración a accionistas e inversores, culpando del mal resultado a "la expresiva depreciación del real frente al dólar" y al "desfasaje de precios de los derivados vendidos en el mercado brasileño en relación a parámetros internacionales".
La deuda de Petrobras está nominada en dólares y muchos de sus costos también son en dólares.
Foster reclamó nuevos reajustes del precio del diésel y la gasolina en Brasil para "garantizar el lucro de la compañía".
El gobierno ha impedido a Petrobras repercutir el alza de los precios internacionales del crudo en los precios de la gasolina y el diésel para no alentar la inflación. Bajo presión de Petrobras, el gobierno finalmente aumentó el precio de la gasolina en 7,83% a fines de junio y el del diésel un 3,94% en esa fecha y luego otro 6% en julio.
Además, Petrobras ha tenido que aumentar sus importaciones de derivados para enfrentar un alza extraordinaria de la demanda, y se ha visto afectada también por la escasez de etanol, que puede ser utilizado por más del 80% de los automóviles nuevos. La empresa compra destilados a un precio hasta 30% más caro que el valor de venta en Brasil, según analistas.