“Las decisiones que se tomen deben corresponder al tamaño del daño que ha recibido la ciudad por las posibles actuaciones ilegales de contratistas” dice una carta enviada por el alcalde electo.

En la misiva entregada al juez de garantías encargado de llevar el caso del ‘Carrusel’ de la contratación del Distrito, en el que el empresario Julio Gómez, resultó beneficiado tras llegar a un acuerdo de aceptación de cargos y servir como testigo; el alcalde electo de Bogotá, Gustavo Petro mostró su rechazo a las medidas tomadas.

De acuerdo a lo expresado por Petro, el acuerdo “no compensa el grave detrimento patrimonial de la ciudad, pues no considera los daños o perjuicios presuntamente generados en los contratos de Fase III de Transmilenio y, al menos, 9 contratos de valorización”

Igualmente, el alcalde electo pidió que se estudien e investiguen todos los casos de contratos que presenten irregularidades en su adjudicación y que la atención no se centre únicamente en los de Transmilenio.