Partidos indolentes. Pastusos y nariñenses en general oran a la Virgen de las Lajas ‘rogándole su intercesión ante el Hijo de Dios a fin de que cuando lleguen las elecciones de octubre, el Conservatismo y el Liberalismo vuelvan a creer que, entre su militancia, sí hay hombres o mujeres capaces de gobernar con eficiencia y honorabilidad los intereses regionales. Ambos partidos resignaron, hace siete o un poco más años el derecho de administrar la ciudad capital y el departamento en hombres de las condiciones éticas e ideológicas de Wilson Borja, Gustavo Petro, Otty Patiño, Antonio Navarro Wolf y otros políticos del Polo Democrático, famosos en la segunda mitad del Siglo XX por sus campañas anti-Establecimiento. Conservadores y liberales forman en Nariño el 80% de la ciudadanía con alguna orientación política. Mas sus jefes optaron por encomendar la región al Polo que mueve sólo un 12% de la opinión regional.
Valencia, pesimista. El Conservatismo antioqueño sufrirá en octubre “la peor catástrofe electoral de su historia” sostuvo el exministro Fabio Valencia Cossio en declaraciones divulgadas ayer por El Colombiano. ”Nos quedamos sin candidato a la alcaldía (de Medellín) y sin candidato a la gobernación cuando podíamos ganar la gobernación y alcanzar una gran alianza en la alcaldía”. Dando cierto color oscuro a su pesimismo, Valencia Cossio afirmó: “Conservatismo pudiendo ganar todo va a perder todo”.¿ Razón? “Se impusieron las ambiciones personales”.
Mes fatal. El próximo septiembre se insinúa como mes penoso en la vida de Valerie Domínguez, ex señorita Colombia, ex actriz talentosa y comerciante triunfadora. Para el día ocho, la justicia le citó a responder por los presuntos delitos de “tentativa de peculado”, “falsedad en documento público” y “asociación para delinquir”, según valoraciones que le hizo la Fiscalía General de Viviana Morales. Habría incurrido en esas faltas por complacer a Juan Manuel Dávila de quien fue novia enamorada hasta marzo de 2009. Lo doloroso o ejemplarizante de este caso es que la Fiscalía pretende utilizar como denunciante a Dávila, el ex novio, quien así obtendría beneficios penales.