Paro-movilizado de 24 horas en Bolivia por ajuste salarial | El Nuevo Siglo
Miércoles, 11 de Abril de 2012

La mayor central sindical de trabajadores de Bolivia (COB) realizó un paro de 24 horas y marchas callejeras en favor de un ajuste salarial acorde a una canasta familiar de 1.150 dólares mensuales, en medio de un diálogo preliminar con el gobierno.

"Esta es nuestra primera medida, el paro-movilizado de 24 horas a nivel nacional", declaró a la AFP el máximo líder de la COB, Juan Carlos Trujillo, quien encabezó una masiva marcha de maestros, médicos, obreros fabriles y mineros que cruzó el corazón de La Paz y culminó en un cabildo en una plaza pública.

Los trabajadores exigen al gobierno del izquierdista Evo Morales un salario mínimo nacional de 1.150 dólares, mientras el poder Ejecutivo sólo ofertó subir el actual -equivalente a 117 dólares- a 134 dólares y dejar la suba general de sueldos a una negociación gobierno-empresarios-trabajadores.

El gobierno ha intentado establecer una mesa de negociaciones, pero los trabajadores han dicho que no estarán en un mismo escenario de concertación con los empresarios, "porque son unos explotadores", afirmó Trujillo.

Los empresarios también han señalado que es dificultoso comenzar unas conversaciones, cuando el Ejecutivo ya puso un piso mínimo de aumento salarial que para ellos es inviable.

Los sindicatos obreros, trabajadores de la salud, mineros y maestros estatales efectuaron una masiva marcha de varios miles de personas que comenzó en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, para recorrer un total de 12 kilómetros.

Acompañados por la explosión de espoletas de dinamita y petardos, los bullangueros manifestantes cruzaron el centro de La Paz para terminar en una plaza pública, en el corazón del casco viejo, en un cabildo, donde denostaron al gobierno de Morales.

En su trayecto, además, entonaron estribillos, entre ellos: "¡más hospitales, menos cocales!", en alusión a la condición de Morales de líder de los cultivadores de coca. En Bolivia se cultivan 31.000 hectáreas de la hoja -según las Naciones Unidas- de las que sólo 12.000 son consideradas legales para usos andinos ancestrales.

 

 

Incluso utilizaron una vieja muletilla, de los tiempos de las dictaduras militares de derecha en las décadas del 60 y 70: "¡fusil, metralla, el pueblo no se calla!".

Portaron banderas bolivianas, de color rojo, amarillo y verdes, con pancartas que pedían más sueldos e incluso aseveraban que Bolivia está bajo una "caquistocracia" (gobierno de mediocres).

"Este es un gobierno que se dice socialista y está yendo en contra de la clase trabajadora", afirmó por separado el líder de los trabajadores de la salud, José Gonzales, un sector que está en huelga indefinida desde el martes, en rechazo al aumento de la jornada laboral de 6 a 8 horas, decretada por Morales.

El resto de la marcha y cabildo se realizó de manera pacífica, aunque dado al carácter masivo de la protesta, el transporte público y privado quedó semiparalizado, obligando a las personas a desplazarse a pie.

 

 

Mientras la marcha se desarrollaba, el gobierno convocó a los huelguistas a trabajar, pues es el ciudadano común el que soporta los efectos de la medida de presión, dijo en una conferencia de prensa, el vicepresidente Alvaro García.

"Hay que trabajar y trabajar 8, 12, 14 horas si queremos un país fuerte y salir de la pobreza", afirmó García, un intelectual de izquierda, quien aseguró que "el trabajo es la base del desarrollo" de un país.

En otra arista del conflicto, médicos y trabajadores de la salud cumplieron su segundo día de huelga nacional y quince de conflicto, mientras las posibilidades de diálogo parecen esfumarse, pues los líderes del sector anunciaron que la protesta se radicalizará con ayunos masivos.