La liquidación de la firma comisionista de Bolsa, Interbolsa, por parte del Gobierno, es el más reciente golpe que sufre el sistema financiero colombiano, hecho que deja en evidencia no solo la fortaleza de un mercado en constante evolución sino también la reacción de las entidades del Gobierno para disminuir su impacto y riesgo entre los usuarios, estableciendo una especie de pararrayos financiero.
En los dos últimos años, el sistema financiero colombiano ha tenido que enfrentar dos liquidaciones claves dentro del mercado bursátil y de firmas comisionistas que están entrelazadas: Proyectar Valores e Interbolsa.
Sin embargo, todavía arrastra los coletazos de la quiebra de la mayor estafa de la famosa pirámide DMG, que sacudió a casi todas las capas sociales del país. Aunque se estima que más de un millón de personas perdieron sus ahorros estimados en 5 billones de pesos, con seguridad nunca se sabrá el monto total de esta quiebra.
Regulaciones
Precisamente con este hecho, el Gobierno fue generando una regulación financiera más estricta, que aunque ha puesto condiciones de funcionamiento al sistema financiero, muchos consideran insuficiente y otros que es acertada y que ha evitado mayores consecuencias entre ahorradores, accionistas, intermediarios, inversionistas y empresarios.
Tanto en las liquidaciones de las firmas comisionistas, Proyectar Valores e Interbolsa, la sensación general es que el Gobierno actuó oportunamente valiéndose tanto de medidas que ya venían aplicándose en el sector financiero como de otras complementarias que tomó para controlar el impacto y asimismo reducir el riesgo de pérdidas tanto oficiales y privadas.
Cuando el Gobierno ordenó en 2011 la liquidación de Proyectar Valores, varios agentes del mercado se preguntaron por qué no se hizo una intervención más oportuna.
Finalmente cuando el Gobierno se decidió la firma acumulaba sanciones por 577 millones de pesos entre multas del Autorregulador del Mercado de Valores (AMV) y la Superfinanciera. Cuando el Ejecutivo ordenó su liquidación se descubrió un faltante de 7.000 millones de pesos en obligaciones sin cumplir, pero también con una iliquidez que no le permitió cubrir un crédito por 44 mil millones de pesos.
Precisamente con esa liquidación, el Gobierno pudo adelantar un proceso rápido de entrega de acciones de Ecopetrol que muchos colombianos habían adquirido mediante la firma intermediaria de valores.
Credibilidad
Asimismo, con las medidas adelantadas tanto por la Superintendencia Financiera, el Ministerio de Hacienda así como el mismo Banco de la República, el Ejecutivo mandó un mensaje claro de credibilidad y responsabilidad al mercado de capitales, de acciones y a los inversionistas. De paso, mostró firmeza en su determinación con los intermediarios de valores en el sentido de que no le temblará la mano para liquidar aquellas firmas que no demuestren solidez y liquidez para responder por su objeto social.
En la liquidación de Interbolsa, el Superintendente Financiero fue contundente con los accionistas que procuraban un alivio para no perder la firma: “el gobierno no está para salvar accionistas ni de esa, ni de ninguna otra comisionista. El gobierno tiene que preservar la confianza del público en el sistema, en la bolsa y tiene que garantizar que los titulares de las acciones no vayan a perder y que los TES (títulos de deuda pública) se salven”.
Sistema integrado
Para el analista financiero, Oscar Cifuentes, “el Gobierno ha demostrado que está atento a lo que sucede en el mercado financiero y que una cosa son los efectos que pueden llegar de las crisis financieras internacionales, a los malos manejos que se derivan del afán especulativo de los corredores de bolsa. Por eso el mercado puede tener la seguridad que las empresas no pueden actuar como islas en un sistema totalmente integrado”.
Cifuentes menciona un término que es claro tanto en el mercado de valores como en el de acciones y es el especulativo. Tal vez una de las advertencias que primero hacen las firmas comisionistas a las personas o empresas que quieren invertir en acciones o títulos es que va a hacerlo en un mercado que es altamente riesgoso.
“Así como un título puede alcanzar una excelente rentabilidad durante un día por motivo de la oferta y demanda, al otro día puede perder su valor por las mismas variaciones del mercado. Este es un sistema totalmente que se mueve en constante especulación. De hecho una de las labores que reconocen los tenedores de títulos es especular con el valor de los papeles”, sostiene Cifuentes.
Sin embargo, las decisiones que toman a diario los intermediarios bursátiles y de quienes se mueven en el mercado tanto de renta fija, es de alta responsabilidad por los fondos que están moviendo y que corresponden en muchos casos a fondos de inversión como el de pensiones.
Respaldos
De allí que el Gobierno haya establecido por medio de la Superintendencia Financiero, unos respaldos financieros significativos a los intermediarios, que en caso de una debacle o de una caída súbita de los títulos, puedan respaldar las inversiones.
Banco de la República
En el caso de Interbolsa, esta preocupación fue compartida tanto por el Gobierno como por el Banco de la República, y quedó demostrada cuando el Emisor decidió inyectar una mayor liquidez al mercado, anunciando la apertura de la ventanilla de expansión a 7 días, con un cupo de 3 billones de pesos, adicional a los 6.5 billones de pesos existentes para la ventanilla a 1 día.
Sin embargo, más importante aún resultó la decisión de abrir la ventanilla a 14 días, con un cupo de 300.000 millones de pesos, para realizar operaciones de expansión transitorias con títulos de deuda corporativa, lo que contribuyó a mermar la incertidumbre reinante en el mercado por lo sucedido con Interbolsa.
Otros sectores del mercado consideran que la decisión que tomó el Emisor responde a que el sector privado bancario les ha venido cerrando las puertas a las comisionistas, porque algunas de ellas tendrían problemas de liquidez.
Un ex directivo de los intermediarios de bolsa dijo que “el tema del Banco de la República y los cupos de liquidez es una buena noticia. Es algo que desde hace mucho las comisionistas pretendían. Eso permite que haya diferenciación entre iliquidez e insolvencia”.
El objetivo del Emisor, de acuerdo con fuentes de la entidad, es enviar un mensaje al mercado para que quien necesite un préstamo rápido pueda acceder hasta por $300.000 millones con un plazo de pago de 14 días, dejando como garantía los repos, ya sean privados o públicos.
El codirector del Banco de la República, Cesar Vallejo, destacó los alcances de las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional para superar la liquidación de Interbolsa y anunció cupos de créditos especiales para los comisionistas y agentes del mercado.
Reunido con expertos de la Universidad Autónoma de Manizales, el directivo del Emisor envió un mensaje de tranquilidad a los inversionistas, a los empresarios y los agentes del mercado, al considerar que el sector bursátil y en general el sistema económico quedó blindado ante la problemática de la empresa. Los cupos para empréstitos los facilitará el Emisor.
Indicó el funcionario que con las medidas del gobierno, y del Banco que fueron rápidas y oportunas, no hay preocupación y los mercados accionarios evolucionan de acuerdo con la respuesta, sin que el efecto sea mayor en la macroeconomía.
Vallejo desestimó conceptos de expertos sobre el efecto negativo en otras empresas comisionistas de bolsa y que el país sufre los efectos de la enfermedad holandesa.
El patrimonio
Por otra parte, el superintendente Financiero, Gerardo Hernández hizo énfasis en que con la liquidación de esta firma “los activos de los clientes se encuentran asegurados patrimonialmente”.
Por su parte, la directora de Fogafin, María Inés Agudelo, manifestó que el primer paso con las decisiones de liquidación, es “ordenar la casa”, es decir establecer los bienes, activos, pasivos y los mecanismos de venta para cumplir con los clientes.
Para tal fin, el Fogafin nombra un liquidador, que en el caso de Interbolsa es Ignacio José Argüello Andrade, que “es el representante legal de Interbolsa en liquidación y cumplirá con las funciones de custodio y administrador de los bienes, en procura de realizar un proceso de liquidación ordenado, rápido y progresivo, siempre en defensa del interés público y de la protección a los inversionistas y acreedores de la entidad”, sostuvo la funcionaria.
Indico, asimismo, que el proceso tiene unos trámites legales de obligatorio cumplimiento, se adelanta por etapas, e implica la presentación de reclamaciones de los inversionistas y acreedores y su reconocimiento por parte del liquidador, la valoración y venta de los activos y el pago de las acreencias, en procura de atender en forma oportuna la totalidad de acreencias.
El Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, ha explicado que la liquidación ordenada por la Superintendencia Financiera de Colombia a la comisionista de bolsa Interbolsa “es la forma de proteger los intereses del mercado y de darle a nuestra economía condiciones de estabilidad y de viabilidad, por eso se toma la decisión”.
Así mismo, esta decisión fue motivada teniendo en cuenta que “Fogafin considera que la viabilidad de Interbolsa está cuestionada, que hay falta de confianza por parte de los agentes que proveen liquidez a Interbolsa, es decir no les están renovando los cupos de crédito las entidades bancarias y que esta es la mejor forma de salvaguardar los intereses del mercado financiero colombiano”.
A partir de la crisis financiera de finales de los noventa, las instituciones financieras y los reguladores comenzaron un proceso de desarrollo e implementación de sistemas integrales de administración de riesgos con requerimientos de capital acordes con la exposición al riesgo de las entidades, regímenes adecuados de constitución de provisiones anticíclicas y la implementación de metodologías de administración de riesgo que cumplieran con estándares internacionales.
Algunos investigadores como Gómez y Orozco, del Banco de La República y de la Superintendencia Financiera respectivamente, plantean un modelo estadístico de alerta temprana que utiliza modelos de duración para evaluar el estado corriente y pronosticar el estado futuro de la salud financiera de los bancos en Colombia.
Sin embargo, el panorama general, es que a pesar de esta situación coyuntural ante la quiebra de entidades comisionistas de bolsa, y la percepción del sistema financiero, es que las entidades crediticias son bastante sólidas, pero no están ajenas a sufrir una quiebra patrimonial.
De allí que sea importante continuar con la aplicación de la regulación establecida por el Gobierno para evitar riesgos mayores y que afecten a los usuarios.
Quiebras y liquidaciones
Si bien la economía en Colombia viene enfrentando la incertidumbre asociada con la crisis internacional, el contagio sobre el sector financiero ha sido relativamente bajo. Sin embargo, en los años 80 y 90 se presentaron quiebras financieras por malos manejos que llevó incluso a muchos directivos a la cárcel. Entre las quiebras más destacadas está la de Financiera Furatena que en 1982 perdió un patrimonio de 80 mil millones de pesos.
Otras entidades en problemas fueron los Fondos de Inversión Grancolombiano y Bolivariano -por los famosos autopréstamos-, la Caja Vocacional, Corfiantioquia, Inversiones Oro, Banco del Estado, Mercantil Hipotecaria y Bancoquia.
Entre las diversas causas que también llevaron a la quiebra a varias entidades figuran fraudes, falsificaciones, créditos falsos y la captación ilegal de dinero, cuyo caso más conocido fue el de la Holding DMG.
El proceso de Interbolsa
Luego de tomar posesión pero al no hallarla viable financieramente, el Gobierno ordenó la liquidación de Interbolsa, con lo que podrá disponer de todos los activos, el patrimonio y los pasivos de la firma comisionista.
El Superintendente Financiero, Gerardo Hernández, dijo que “el Gobierno confirmó que la entidad no está en capacidad de seguir desarrollando su objeto social y la mejor manera de proteger al mercado es mediante la liquidación”.
Al ser una liquidación obligada, los directivos de la entidad comisionistas deberán responder por las obligaciones pendientes, con lo que la liquidación apenas es un primer paso en todo el embrollo que puede desembocar en los estrados judiciales.
Toda la crisis de Interbolsa se originó en un crédito impago de un repo por 20 mil millones de pesos a una entidad bancaria y que la firma tenía garantizados con acciones de Fabricato. Al no cubrir esa obligación, se descubrió la iliquidez de la comisionista, y con ello su situación financiera que se había soportado sobre repos con acciones de baja bursatilidad.
Precisamente, la decisión del Ejecutivo se adelantó a la convocatoria a una junta extraordinaria que hizo el presidente de Interbolsa, Rodrigo Jaramillo, a todos los directivos y accionistas para el próximo 16 de noviembre, pero esa reunión quedó suspendida.
El viernes, la Superintendencia Financiera autorizó a la Bolsa de Valores de Colombia aplazar el proceso de cumplimiento de todas las obligaciones contraídas en materia de compensación, liquidación, administración de garantías, anotación en cuenta y demás actos asociados con la firma en liquidación de Interbolsa, hasta el próximo martes.
La medida fue presentada por la Bolsa, con el respaldo del conjunto de firmas comisionistas que operan en el mercado accionario del país, y está orientada a preservar los derechos de los inversionistas y la integridad del mercado de valores.
En consecuencia, el proceso de cumplimiento de las mencionadas operaciones deberá perfeccionarse a más tardar el 13 de noviembre, inclusive, para lo cual los proveedores de infraestructura y los intermediarios de valores operarán de manera ininterrumpida durante este período.
Para asegurar el adecuado cumplimiento de dichas operaciones, es necesario que durante el día de hoy, los clientes y las sociedades comisionistas de bolsa ejecuten las actividades necesarias para viabilizar el cumplimiento de las operaciones y particularmente, para proveer los recursos requeridos cuando ello resulte necesario.